Y nos pusimos a filosofar…
Hoy pienso en esos días y, más allá de la melancolía, extraño mi intuitiva especulación sobre la vida. Una duda, un misterio y la gran pregunta. ¿Qué es la vida? ¿Qué significado tiene vivir? ¿Qué significa mi vida? Hoy continúo filosofando y, lo digo como defecto, con más herramientas conceptuales, empero, jamás podré hacerlo como aquellos días de instinto natural por, precisamente, no saber tanto. ¿Tanto? Sí, ni tanto y eso es peor que no saber nada filosóficamente hablando. Imagínate filosofar sin prejuicios dogmáticos ni sentencias indubitables únicamente en sus propios sistemas, filosofar sin teorías ni contenidos doctrinales que contienen de antemano un objetivo determinado. Filosofar libremente, como cuando eras niño.
¿Recuerdas?
Hoy es la navidad del 2018 y, más allá de no encontrarle un sentido profundo a dicho ritual, no puedo dejar de pensar en mis hijos. Mi hija mayor va a cumplir diecisiete años, la misma edad que yo tenía cuando me buscaba la policía por lo de Humboldt. ¿Cómo puedo aconsejarla si ni siquiera me permiten verla? Mi hijo tiene quince años, como cuando llegué a Lake Tahoe y, tristemente, tampoco me permiten verlo. Me gustaría platicar con él. Mi hija menor, Sofía, acaba de cumplir once años y no he podido abrazarla. Quiero mirar sus ojos y decirle que la amo.
Quiero abrazarlos.
Los extraño mucho, quisiera conversar con ellos y, si ellos quieren, aconsejarlos filosóficamente para enfrentar sus problemas profundos y cotidianos.
Hoy, precisamente hoy, me entero que Teo, mi perro xoloitzcuintle, ha muerto.
—Te veré en el Mictlán, mi fiel amigo.
—Te esperaré en el río Apanohuacalhuia, Serner.
La última vez que lo vi fue hace más de tres años.
—Adiós, Teo.
* * *
*La ilustración “Teo filosofando” es de Mariana Serner (8 de enero 2011)
Continúa 47
Por: Serner Mexica
Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".
