En el primer juego, el panameño Alberto Guerrero maniató a los luciferes en una sola carrera en seis entradas y los Bravos tenían una ventaja de 5 a 1. Pero al igual que la mayoría de los equipos carecen de relevo confiable y en las dos últimas entradas permitieron 10 carreras auxiliados por un par de costosos errores del paracorto novato Antonio Alvarez y aunque los Bravos reaccionaron en el noveno inning con cinco carreras se quedaron cortos y cayeron 11 a 10.
Para el segundo juego, el pitcheo leonés encabezado por el abridor Samuel Tavarez fue castigado con siete cuadrangulares para caer apaleado 17 a 10, pese a un homerun de Alberth Martínez.
Finalmente, el domingo, los bravos contaron con una buena apertura de Faustino Carrera y un homerun de Sanber Pimentel para llevarse el de la honra 13 a 9, pese a un rally de cinco carreras de los escarlatas en la última entrada.
Conviene recordar que Miguel Tejada sustituyó a Matías Carrillo como manager a principios de temporada, pero las cosas no mejoraron mucho.
Y es que, aunque tiene una buena batería que incluye a los ya mencionados Martínez y Pimentel y al sargento Jimnny Kerrigan carecen de un pitcheo confiable, pese a lo cual se encuentra todavía arañando puesto de playoff.

Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.