Redacción
A partir de ahora el transporte público en Tula será vigilado por elementos de la policía municipal y la Coordinación de Seguridad Estatal, con el objetivo de prevenir el delito, y de establecer un contacto directo entre usuarios, operadores y autoridades.
En distintos puntos de revisión, las unidades de transporte público son inspeccionadas de acuerdo a los protocolos de seguridad establecidos, y siempre respetando los derechos humanos tanto de choferes como de pasajeros.
Los agentes preguntan si el viaje es seguro o se ha identificado alguna actitud sospechosa de algún tripulante; además, orientan a los conductores sobre medidas de seguridad.