Es costumbre que en las visitas del presidente de la República o cuando hay hechos importantes como elecciones, y más si son para elegir gobernador, aparezcan los pescadores en ese río revuelto, provocando problemas sociales con protestas que incluyen desde luego cierre de carreteras o plantones, para buscar con esa exhibición logros que, por alguna causa, incluida la desatención, no se han podido conseguir.
Y en este tipo de actuaciones en Hidalgo hay verdaderos maestros como los antorchistas, los Charrez -ahora caídos en desgracia-, y sin duda personas como el alcalde de San Salvador, Armando Azpeitia, para montar sus circos, en que lo mismo exige obras y acciones, que la reapertura de El Mexe, desde luego con la intención manifiesta de quedarse con esa normal para sus movidas.
De hecho, ya hicieron su aparición los antorchistas y los grupos del alcalde Azpeitia.
No hay nada raro, es el tiempo en que tiran la red para ver qué pescan.
Y siendo tiempos electorales, sería ingenuo no ver que esas cunas tienen o deben tener una mano que las mece.
No hay que olvidar que en las grillas no hay casualidades ni generación espontánea, porque los grillos saben cuándo saltar y cuándo tirar las redes.
Y es ahora el tiempo… y se ve.
