NO ES FÁCIL. Alta recurrencia a cesáreas preocupa a SSH

Redacción

Especialistas consideran que se debe recurrir a una cesárea cuando la vida de la madre o el bebé están peligro, y de ninguna manera debe ser elegida como primera opción para el alumbramiento. Y es que el notable incremento en el número de cesáreas ha preocupado ya a la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), por lo que instrumenta acciones enfocadas a la detección y atención oportuna del término del embarazo.

La SSH trabaja no sólo en concientizar al personal de salud para disminuir el número de cesáreas sin indicaciones justificadas en las instituciones del sector público y privado, sino que también busca promover el parto natural como la mejor alternativa de nacimiento para los bebés.

Por ello, es de suma importancia que las mujeres estén informadas de los riesgos que representa esta alternativa de alumbramiento: las cesáreas pueden provocar complicaciones y discapacidades severas y permanentes o incluso la muerte de los bebés. Especialmente cuando ocurren en lugares que carecen de instalaciones apropiadas para realizar cirugías de forma segura y atender las complicaciones quirúrgicas que pudieran presentarse.

Las complicaciones en la madre pueden ser: hemorragia uterina, lesiones de intestino delgado o grueso y de vejiga. Así como obstrucción arterial (tromboembolismo), desgarres o laceraciones de las arterias uterinas, entre otras.

La anestesia puede condicionar complicaciones respiratorias como: hipoventilación, depresión respiratoria, edema laríngeo, broncoaspiración, broncoconstricción, paro respiratorio o absorción masiva de anestesia.

También puede ocasionar problemas cardiovasculares: hipertensión, taquicardia, bradicardia, arritmia, insuficiencia cardíaca y paro cardíaco. Las principales complicaciones fetales son: traumatismos, broncoaspiración y depresión respiratoria.

Para coadyuvar a la concientización, Marco Antonio Escamilla Acosta, secretario de Salud, trabaja en la implementación del Proyecto MADRRRE (Modelo de Atención para Disminuir el Riesgo Reproductivo, del Recién nacido y del Embarazo), estrategia que ayudará a disminuir la mortalidad materna y perinatal. Parte de este proyecto es la alerta PROTEGEN (Protocolo para el tratamiento de las enfermedades graves del embarazo y el neonato), la cual promueve que la atención especializada en la etapa pre gestacional, así como en el primer trimestre del embarazo y parto, pueden marcar la diferencia entre la vida o la muerte de madre e hijo.

Asimismo, involucra a la embarazada y su familia, quienes deberán velar por la salud de la futura mamá y estar pendientes para identificar algún signo o síntoma de diabetes gestacional y preeclamsia, principales complicaciones que se presentan durante el embarazo.