La titular de la Comisión de Derechos Humanos de Hidalgo, Ana Karen Parra Bonilla, aseguró que la salida precipitada del Congreso local, posterior a presentar su primer informe de labores, se debió a que no existían las condiciones de seguridad para garantizar su integridad, ni la de las manifestantes, ni la de los representantes de los medios de comunicación.
“Yo no me detuve a platicar ni con tus colegas de los medios de comunicación, ni a escuchar a las personas que estaban manifestándose porque el espacio no era seguro, no había las condiciones de seguridad”.
Indicó que se sintió vulnerable y en un ambiente hostil desde el inicio del encuentro, por lo que fue la mejor manera de evitar una confrontación y reiteró que valorando en retrospectiva el hecho, hoy volvería a hacerlo de la misma manera que en aquella ocasión.
Parra Bonilla igualmente informó que derivado de su actuar al frente de este organismo y ante la presencia de “incidentes” que pueden atribuirse a casualidades, o bien, se trata de actos de intimidación y acoso, ha tenido que interponer una denuncia ante la Procuraduría de Justicia de la entidad para salvaguardar su integridad.
Con respecto a los señalamientos de falta de empatía de la funcionaria hacia algunos sectores de la sociedad civil, aseguró que sólo se trata de un grupo que se ha manifestado, al cual tiene perfectamente identificado, así como a sus expedientes y reiteró que no dejará que una postura cambie la forma en que se atienden los temas al interior de la Comisión.
“Hay claridad sobre qué y cómo se están haciendo las cosas, así como apertura para explicar y dialogar. La verdad está en los expedientes y se actúa conforme a lo que dicta la ley”.
