Este lunes, el secretario de Gobierno de Hidalgo, Guillermo Olivares Reyna, detalló que el proceso de mediación entre las dos facciones que disputan el control de la planta cementera Cruz Azul, en Tula, quedó suspendido debido a la ausencia de una de las partes.
Según explicó el funcionario, el representante de uno de los grupos en pugna, Víctor Velázquez, se había comprometido a asistir a la mesa de trabajo en el Palacio de Gobierno, programada para las 11 de la mañana, sin embargo, no cumplió su promesa.
Olivares Reyna señaló que sólo los cooperativistas de la planta se presentaron, lo cual impidió el inicio del diálogo. “Ya saben ustedes que para que se lleve un proceso de mediación se necesita la voluntad de las partes y si alguna de ellas no tiene esa voluntad, pues no se puede llevar a cabo”, expresó el secretario.
La intención de la mesa de trabajo era facilitar un acuerdo que destrabe el conflicto que mantiene inactiva a la planta, fuente productiva clave para la región y que lleva más de cuatro años paralizada.
Aunque el proceso de mediación es independiente del proceso judicial, Olivares subrayó que la falta de disposición de una de las partes continúa retrasando el funcionamiento de la fábrica.
“Esto de generar diálogo, pláticas conciliatorias, el proceso de mediación, es independiente al proceso judicial. El proceso judicial seguirá su rumbo, su transitar y al final de cuentas se tendrá que pronunciar la autoridad sobre quién tiene la razón”, expresó.