Se estima que el proyecto de una megaplanta de tratamiento de aguas residuales para la zona metropolitana de Pachuca tendrá un costo de entre 800 y mil millones de pesos. El líquido se dispondría para riego de áreas verdes, fuentes y para otras actividades industriales que puedan reutilizarla.
En el país, la zona metropolitana pachuqueña es la única que carece de una planta de tratamiento de sus aguas residuales de tal magnitud, pues sólo se cuenta con seis pequeñas que logran sanear 450 litros por segundo. Y desafortunadamente esta agua actualmente se va a los canales.
De acuerdo con Juan Evel Chávez Trovamala, director general de la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (CAASIM), el financiamiento de la megaplanta de tratamiento se gestiona con las instituciones federales como la Comisión Nacional del Agua (Conagua) e incluso Banobras.
Con disposición de terrenos en la zona sur de la metropolí, se destacó que sería construida en la salida a México: “Tenemos terrenos, que son propiedad de la institución, para poder albergarla”, detalló el funcionario.
La megaplanta de tratamiento de aguas permitirá vender agua tratada a empresas como Grupo Pachuca, que riega el césped de sus canchas y demás áreas verdes con agua potable, pues gracias a un convenio suscrito con la anterior administración pactó pagar sólo 5 millones de pesos anuales por todo el consumo de sus empresas, incluida una escuela dedicada al deporte.
A decir de la CAASIM, a este consorcio ya se le reactivó el cobro con medidor y se realizará de manera mensual como cualquier otro usuario, por lo que la adquisición del agua residual será una mejor opción para otras actividades.
“El futuro será el agua tratada y tenemos que comenzar a implementar las acciones para cuidar el medio ambiente”, expresó el directivo del organismo operador, y añadió que a los constructores de nuevos fraccionamientos se les exigirá que cuenten con una planta de tratamiento de agua para regar sus áreas verdes.
CAASIM TIENE 340 TERRENOS
Ante la llega de una nueva administración estatal, y que incluyó el cambio de titular de CAASIM, se detectó que el organismo operador del agua posee 340 predios, de los cuales en un 50 por ciento no se tenía conocimiento de la existencia.
Tras realizar una revisión de cada uno, el Gobierno de Hidalgo pudo constatar que algunos predios no estaban regularizados, por lo que se comenzó con el procedimiento para escriturar y tener control de estos, señaló Juan Evel Chávez.
En uno de esto predios se ubicaría la megaplata de tratamiento de aguas que evitaría que el agua se vierta a los canales como destino final.
