La agresión a una célula de la Policía Estatal en el municipio de Ajacuba, cuyos elementos fueron golpeados y desarmados por pobladores, detonó un amplio operativo en respuesta que derivó en aseguramientos.
De acuerdo con los reportes, la noche del viernes agentes estatales patrullaban la demarcación como parte de las acciones de seguridad y vigilancia, cuando al intentar intervenir un vehículo comenzó una persecución.
En el trayecto, un grupo de ciudadanos cerró el paso a la unidad policial y obligaron a detener su marcha. Los sujetos comenzaron a agredir la unidad, provocándole daños y también hicieron descender a los tres tripulantes, a los que golpearon y despojaron de tres armas de cargo.
Luego del ataque los ciudadanos se dieron a la fuga y, lesionados, los elementos de seguridad notificaron a la central de radio lo ocurrido.
Lo anterior motivó el desarrollo de un amplio operativo en respuesta a las agresiones contra los representantes de la ley y para la búsqueda del armamento robado, lo que derivó en la detención de seis individuos relacionados con actividades delictivas.
Además de las personas, fueron asegurados contenedores con 12 mil litros de hidrocarburos, dos escopetas, 13 vehículos, tres motocicletas y varias dosis de sustancias ilícitas.
Mediante los rastreos también fueron recuperadas las armas despojadas a los uniformados y fue posible inhabilitar una toma clandestina para el robo de combustible en un ducto de Pemex.
Las acciones fueron implementadas por la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo, con la colaboración de instituciones federales y estatales.
