Esta semana circuló información en redes sociales sobre el nepotismo y manejo “sospechoso” de recursos por parte del actual titular de la Sedagroh, Carlos Muñiz Rodríguez, en la Secretaría de Educación Pública, sobre todo en la dirección de tiendas escolares, donde parecen trabajar de planta o de aviadores diversos familiares del secretario. Aunque tampoco se puede olvidar que Muñiz Rodríguez fue señalado junto a su hermano por abuso de poder al ser favorecidos en la venta de artículos de papelería para los paquetes escolares desde que Sayonara Vargas era titular de Educación Pública.
Lo interesante es que los familiares de Muñiz Rodríguez han ofrecido “protección” a diversos personajes del gremio de los “profes” y causando grillitas en la secretaría que encabeza Atilano Rodríguez, pues parece que el titular de la Sedagroh ya le entró a las broncas magisteriales.
Lo más interesante es que será la Secretaría de Educación Pública del Estado de Hidalgo la que recibirá el 42% del presupuesto de 2019, e independientemente de los trabajos del titular existen “fuguitas” en el manejo de presupuesto con una estructura familiar y de partido.
Todo esto mientras la Sedagroh pasa más tiempo festejando cumpleaños y días festivos que trabajando; no se puede pasar por alto que fue una de las secretarías más cuestionadas en comparecencias por su falta de resultados y clarificación de utilización de presupuesto estatal y la alta recepción de recursos federales sin existir constancia específica de cuánto recibió y en qué gastó.
Mientras la SEPH intenta depurar la corrupción y clarificar el manejo de recursos, la familia Muñiz Rodríguez hace de las suyas interviniendo en conflictos referentes a la materia de educación, mientras en agricultura y desarrollo agropecuario Hidalgo se queda sin avances. ¿Termina el sexenio el secretario y su familia?
