El diputado federal de Morena, Ricardo Crespo Arroyo, aseguró que el PRI en Hidalgo se percibe como un partido “ahogado, desaforado, sin presencia, sin discurso y sin militancia”.
Tras presentar su informe en las canchas de la colonia Cubitos, Crespo Arroyo fue cuestionado sobre su antiguo partido y otros temas legislativos. Sobre el Revolucionario Institucional, recordó que desde hace ocho años dejó ese capítulo en su vida, luego fue regidor independiente, y en el trienio pasado se unió a Morena, donde actualmente es legislador federal.
“Yo veo que la dirigente, si es que es dirigente, Carolina Viggiano, está en un círculo muy cerrado donde nada más está ella y Marco Antonio Mendoza, quien es actual dirigente del partido. Creo que Montcerrat Hernández, la diputada local… de ahí yo no veo la participación de nadie más. No tienen presencia en el estado de Hidalgo. Ya el PRI no existe en el estado de Hidalgo”, agregó.
Cuestionado sobre el incidente en el que Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas golpeó a Gerardo Fernández Noroña durante la última sesión de la Permanente en el Congreso de la Unión, Crespo Arroyo lo calificó como un porro. “Hubo desesperación, falta de capacidad de diálogo, de pensamiento, de conocimiento al no saber ya qué hacer, qué contestar ni qué proponer; como cualquier porro que lo es él, se fue a los golpes”, señaló.
Respecto al segundo año legislativo, el coordinador de la bancada de Morena en Hidalgo adelantó que se enfocarán en la ley de extorsión y la ley de aduanas, además del paquete hacendario que incluye la ley de ingresos, la ley de egresos y la Miscelánea Fiscal. Crespo Arroyo indicó que buscarán que los recursos federales para la entidad se dirijan principalmente a salud, seguridad y educación.