Se trata de una adaptación de una obra de Taichi Yamada bastante original. El solitario escritor de guiones Adam (Andrew Scott) vive en un edificio abandonado en el que solamente habita otra persona, Harry (Paul Mescal).
Luego de su extraña visita, Adam emprende un viaje hacia el hogar de su niñez. Para su sorpresa encuentra a sus padres (Jaime Bell, el inolvidable Billy Idol) y Claire Foy. Eso no tendría nada de extraño, si no fuera porque ambos murieron cuando él era muy joven.
Adam establece una relación con ellos, y les confiesa que es gay. No es sino hasta que les quiere presentar a Harry, que se percata de que también está muerto.
El director de La Sangre Helada presenta un tema común de una forma bastante original. Sin embargo, el filme luce pesimista y triste, sobre todo por la actuación de Scott a quien ya vimos en Spectre y Pride.
All of us Strangers resulta un filme extraño, que no será del agrado de todo el público.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
