La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) se encamina a normalizar su política monetaria, y este miércoles ha incrementado en un cuarto de punto sus tasas de interés, llevándolas de 0.75% a 1%, mostrando su optimismo por el crecimiento de la economía estadounidense y la creación de empleos.
Al expresidente Barack Obama le tocó gestionar la crisis heredada por George W. Bush en 2008, ahora a Donald Trump y sus reformas, al parecer, les corresponderá dirigir la recuperación de una economía devastada por la crisis inmobiliaria y la especulación financiera.
La coordinación de las políticas monetarias, propias de la globalización de la economía mundial, parece haber llegado a su fin con la llegada de Trump y su rechazo al libre comercio. Europa y Estados Unidos han elegido divergir en la trayectoria de sus políticas monetarias, y mientras que el Banco Central Europeo mantiene sus tipos de interés cercanos a 0%, la FED ha decidido iniciar la carretera hacia la normalización de su política monetaria.
Aunque el aumento era previsto por analistas y mercados financieros, el aumento de las tasas de interés en un cuarto de punto, para llevarlas a 1%, ha estimulado la actividad de todos los mercados en el planeta y ahora esperan los dos próximos aumentos anunciados para este año, los cuales probablemente conduzcan las tasas a 1.25% y 1.50% para finales de año, y esto podría hacer que a finales de 2018 la FED mantenga sus tasas en 3%.
A la espera de la puesta en marcha del plan de infraestructura y de la reforma financiera de Donald Trump, las proyecciones económicas de la FED son prácticamente idénticas a los presentadas en diciembre pasado; pues la Reserva espera un crecimiento de la economía de 2.1% para este año y para 2017 del 3% al 4%; mientras que proyecta una inflación de 1.9% en 2017 y de 4.5% en 2018.
Sin embargo, nada está escrito, Trump puede modificar sus puntos de vista sobre el comercio o mantener sus promesas; en tanto que el Brexit, la crisis en Grecia, la independencia de Escocia, la guerra en Medio Oriente, los conflictos con Rusia y China, pueden agregar mayor inestabilidad a la economía mundial y modificar cualquier proyección, pese al optimismo de la FED.
Hay un gran optimismo entre los empresarios de Estados Unidos por las reformas del presidente y sus promesas de campaña. La posible reducción de impuestos y la desregulación de algunos sectores de la economía como la banca, medio ambiente, entre otros, han generado grandes expectativas entre los hombres de negocios.

Por: José Luis Ortiz Santillán
Economista, amante de la música, la poesía y los animales. Realizó estudios de economía en la Universidad Católica de Lovaina, la Universidad Libre de Bruselas y la Universidad de Oriente de Santiago de Cuba. Se ha especializado en temas de planificación, economía internacional e integración. Desde sus estudios de licenciatura ha estado ligado a la docencia como alumno ayudante, catedrático e investigador. Participó en la revolución popular sandinista en Nicaragua, donde trabajó en el ministerio de comunicaciones y de planificación. A su regreso a México en 1995, fue asesor del Secretario de Finanzas del gobernador de Hidalgo, Jesús Murillo Karam, y en 1998, fundador del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.