Redacción
Hace unas horas, Francia comenzó a ser principal nota en los medios de comunicación, la razón: dos ataques: la explosión de una carta bomba en la sede del Fondo Monetario Internacional (FMI), y el tiroteo en una escuela.
Del primer hecho una mujer resultó herida, en lo que el presidente francés, François Hollande, calificó de “atentado”. La herida es una secretaria de dirección a la que le estalló la carta mientras la abría. “Sufre algunas quemaduras” en la cara y las manos, indicó una fuente policial.
La fiscalía antiterrorista abrió una investigación por intento de asesinato en relación con una empresa terrorista. Varias personas fueron evacuadas de la sede “por razones de seguridad”.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Christine Lagarde, condenó el “acto de violencia” cometido este jueves contra la sede de la institución multilateral en París.
El grupo anarquista griego Conspiración de las Células de Fuego reivindicó el envío de ese paquete.
En 2010, ese grupo había reivindicado una serie de paquetes bomba, en particular a la cancillería alemana, que había desatado una alerta en Europa.
Por su arte, el tiroteo que provocó una decena de heridos sucedió en un instituto de Grasse, sin embargo las autoridades lo catalogaron como “el acto loco de un joven frágil fascinado por las armas de fuego”.
Hollande descartó el carácter terrorista del acto que, según Vallaud-Belkacem, provocó cuatro heridos de bala y obligó a atender a otras 10 personas afectadas psicológicamente o ligeramente dañadas por empujones ante el movimiento de pánico causado.
