La comunicación mediática ha sido rebasada por el uso de las redes sociales como signo de una era donde no existe control de la información, creando una zona de vacío en públicos ampliamente ignorantes que no suelen cuestionar la veracidad de las noticias y, lo que es peor, no les interesa hacerlo, por lo que cualquier noticia falsa, o fake news, puede convertirse en una “verdad acuñada o creada”.
Pero ¿cuáles son las implicaciones de validar noticias falsas? Se crean escenarios múltiples de conducción social cuyo control es inherente a fines que pervierten la dirección de la “conciencia”, creando condiciones oscuras de fines utilitaristas que lo mismo pueden avalar actos delincuenciales, brotes racistas y xenofóbicos, conductas superfluas de consumo, impugnación antidemocrática y validación de beligerancia social en múltiples dimensiones y estratos sociales; de hecho, cada una de estas perversiones es proclive al desencuentro social y a la atomización.
La paradoja es que no se han diseñado filtros simultáneos de escrutinio sobre la veracidad de la información publicable, por lo que la validez de las noticias se encuentra en un delicado proceso que ya ha causado estragos a nivel internacional, sobre todo en materia de seguridad de Estado y preservación ciudadana, como ha sucedido en Estados Unidos, pese a ser un país poderoso y con una maquinaria de control impresionante.
Cabe admitir que el control político del Estado, históricamente, ha generado noticias falsas para el control social, pero ahora desborda cualquier vigilancia y depuración de la información, por lo que cualquiera puede manipular los contenidos para obtener dividendos múltiples; recordemos las amenazas de grupos delincuenciales que suelen inhibir las actividades sociales de diversa índole.
La era de las fake news presupone activar la inteligencia y escrutinio social de ciudadanías instruidas, ese es el mejor filtro para controlar las conductas sociales; lo contrario implica el desamparo de la inteligencia y el equilibrio social.
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Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.
