Al grito de ¡gobernador! -en la sede del PRI Hidalgo-, minúsculas fuerzas vivas del tricolor destaparon, con la premura de una algarabía inusitada, el perfil de candidatura a la gubernatura para la sucesión transexenal 2028 de su líder Marco Mendoza Bustamante.
La lectura de este anticipado destape político debe ser aclarada y otorga, mis únicos y queridos lectores, un preámbulo para advertir un suicidio político en el PRI Hidalgo o una tortuosa crónica de una extinción anunciada.
Desde que el maíz llega de Estados Unidos, hasta los caracoles hablan inglés
Es menester del análisis crítico ponderar las implicaciones del destape anticipado del PRI Hidalgo a la gubernatura.
La paradoja de este evento implica, en primer término, que el destape de Marco Mendoza se hizo con la anuencia de la lideresa Carolina Viggiano, porque en el PRI Hidalgo no se mueve una hoja sin su consentimiento; por lo que los lugareños que se dieron cita en el elefante blanco no pudieron entrar a los vítores, sin su pleno conocimiento.
En este trance enigmático, Marco Mendoza, en vez de apresurarse a la mesura y conminar a la leva que parecía panóptico de la Revolución francesa frente a la guillotina, a que se disciplinara, aceptó el apapacho del conglomerado y, por ende, también aceptó, tácitamente, que es el próximo candidato del PRI a la gubernatura de Hidalgo para el 2028. A título de cualquier cosa, esto es una torpeza política y un error garrafal, porque quemar un cartucho antes de empezar la batalla, decía Napoleón, es estar al borde de Waterloo.
La antidemocracia es la antesala a la tiranía
En un traspié antidemocrático, el hecho de que esta nominación anticipada de Marco Mendoza se haya efectuado sin una consulta a la base militante -lo cual no se hizo- devela una actitud antidemocrática de sesgo político institucional, condición que -en un momento donde el PRI de Alito acusa al gobierno de la presidenta de ser un narcoestado y una dictadura comunista- es poco menos que patear el pesebre del sistema político de la democracia que pretende defender el tricolor.
De peras o manzanas
El destape de Marco Mendoza como perfil del PRI Hidalgo a la sucesión transexenal del 2028 también enuncia que, en el tricolor, ya se sabe que será un personero masculino el que habrá de suceder al actual gobernador Julio Menchaca; información Top Secret, porque se supone que, bajo la lógica de la reforma de alternancia política de género, debería ser una sucesión femenina, lo que devela, tácitamente, que la bancada de la derecha en el Congreso local ya sabe que será un “candidato”.
Pánfilo, atízale al comal
Frente al hecho contundente de que el proceso de afiliación al PRI Hidalgo ha resultado discreto, por no decir, un verdadero fracaso, ¿bajo qué lógica formal se puede postular a Marco Mendoza, líder del tricolor, que es quien orquesta y encauza este proceso que no llega a reclutamiento de leva en Hidalgo?
Petronila, la hora ha llegado
En la suma política, el destape de Marco Mendoza es la crónica de una derrota anunciada y de un suicidio político que, a todas luces, no permite inferir ¿cuál fue el cálculo político de los asesores de partido, que parece que no los tiene el PRI Hidalgo para perfilar esta candidatura entre luces, sombras y la posible extinción del PRINOSAURIO?
La nostalgia me invade
Sigo extrañando, mis únicos y queridos lectores, a priistas de la talla de Don -con mayúscula- Jesús Reyes Heroles, que dejó huella política, aún dentro de la monarquía sexenal que el tricolor impuso por más de siete décadas en la nación y, en Hidalgo, por más de nueve.

Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.