Todavía no toma posesión Javier Milei como presidente de Argentina y López Obrador, sin pelos en la lengua, ya develó lo que todo el continente sabe: Milei es un fascista.
En la mañanera -buena costumbre que inclusive Carolina Viggiano ha imitado, y si no lo han hecho otros políticos es porque se levantan tarde y no tienen repertorio para comentar-, el presidente López Obrador le dio la bienvenida al triunfante Javier Milei y lo describió como facho o fascista, y dejó puesta la mesa para que el continente comience con la efervescencia de las sanas críticas hacia la gestión del nuevo presidente de Argentina que en diciembre entrará en la transición de mando.
Lo sustantivo de las declaraciones de López Obrador es la congruencia política a la que pocos se atreven, pues pocos presidentes, en lugar de felicitar a Javier Milei con una caravana de elogios y palmoteos entreguistas (que en México les llaman huelepedos), se han atrevido a denunciar su postura fascista que atenta contra las minorías, el género, la pobreza e incluso la libertad e igualdad social.
Pese a los gritos de Milei de “¡Viva la libertad, carajo!”, la realidad que les espera a los argentinos en el gobierno del ultraderechista es la persecución política, la intolerancia y la mordaza y mofa gubernamental, por lo que primero se debe entender qué es la libertad para Milei.
La libertad para Javier Milei no es otra cosa que proteger a la élite capitalista argentina e internacional en detrimento de obreros, campesinos y trabajadores en general; es hacer de la patria, la patria de los conservadores y ultraconservadores, y de la justicia, el instrumento de persecución de todos aquellos que huelan a “progres”, es decir, los que suelen aspirar a un mundo en equidad, sin rencor ni revanchismo político.
Muchos lectores se estarán preguntando: ¿entonces por qué Milei ganó las elecciones? La respuesta es clara: cuando ni la derecha ni la izquierda son opciones viables, el fascismo se asoma feroz como respuesta de la barbarie política y social.
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Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.
