En su año de debut como equipo de expansión, los Mariachis de Guadalajara sorprendieron gratamente, al terminar como líderes sureños. Fueron derrotados en la final de zona, con un equipo conformado por préstamos y peloteros poco conocidos.
Para este año, el equipo quedó mermado, lo cual pudimos notar en su visita al estadio Harp Helú, donde perdieron la serie en un duelo de batazos con los Diablos Rojos (11-9 y 11 a 10), rescatando el del honor (14-12).
Conviene recordar que el mánager Benjamín Gil emigró a Estados Unidos y es sustituido por Sergio Omar Gastélum, quien pasará a la historia como el mandamás de los Diablos que nunca los dirigió. A esa pérdida hay que añadir la de los cañoneros zurdos Adrián González y Jesse Castillo, además del receptor Carlos Medivil; sin embargo, el equipo no lo resentirá, como se vio con la adición de David Olmedo Barrera y Steve Wilkerson a los ya conocidos Luis Sardiñas, Anthony García, el champion bat Leo Heras y Niko Vásquez.
Los tapatíos quedaron mermados en el pitcheo con la ausencia del nipón Masaru Nakamura, quien fue el lanzador del año, terminando invicto. Otro jugador perdido fue el cerrador Fernando Cruz.
Ninguno de los abridores en la capital (Henry Centeno, Luis Miranda y Marco Carrillo) duró mucho en el cerrito y, aunque el único triunfo fue con un rescate de Alejandro Chávez, se antoja una misión bastante difícil para el novel lanzador.
Así, pues, el panorama para estos Mariachis no luce tan promisorio como el año pasado.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
