Los hechos ocurrieron durante el mes de noviembre del año 2018, cuando el sacerdote Aristeo, “Teo” Baca, llevó a cabo la agresión sexual en contra de la niña, que en ese entonces era monaguillo de la parroquia Santa María de la Montaña.
Tras la acusación, el religioso estuvo bajo arresto desde febrero de 2019 en espera de que concluyera el proceso en su contra.
Como parte de los argumentos que presentó la defensa del sacerdote, señalaban supuestas inconsistencias en varias declaraciones, así como en resultados de exámenes médicos y psicológicos.
Sin embargo, los abogados que representaban a la menor, entregaron las pruebas suficientes y contundentes, para que finalmente los jueces Carlos Jaime Rodríguez García, Florina Coronado Burciaga y Arnulfo Arellanes Hernández, declararan culpable a Aristeo Baca, el pasado lunes 22 de febrero.
FUENTE: EL HERALDO DE JUÁREZ
