El apogeo del huachicol

Contrario al deseo presidencial, el robo de combustible deja elevadas ganancias en México e Hidalgo está en el primer lugar de incidencia de este delito.

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Por: José Guadalupe Rodríguez Cruz

*Egresado de la UNAM como licenciado en Derecho y Diplomado por el Instituto de Administración Pública de Querétaro y por la Universidad Iberoamericana en Políticas Públicas. *Regidor Municipal en Tula, Secretario Municipal de Tula, Diputado local en la LVII y LIX Legislaturas en el estado de Hidalgo y Presidente Municipal Constitucional de Tula 2000-2003. *Autor del libro “Desde el Congreso Hidalguense” y coautor del libro “Tula... su Historia” *Director y fundador del periódico bisemanario “Nueva Imagen de Hidalgo”, que desde 1988 se pública en Tula, Hgo.

No hay semana en que no nos enteremos de una fuga -muchas veces con un estallido- de combustible o incendios en los que suele haber personas lesionadas e incluso muertas, como la trágica tarde del 18 de febrero del 2019 en un predio entre Tlaxcoapan y Tlahuelipan, donde hubo 137 decesos registrados oficialmente, luego de que explotó la gasolina que corría como agua en una canaleta y la gente se acercó para llevarla en cubetas, tambos o lo que fuera.

Si derivado de ese trágico acontecimiento -en donde murió gente que seguramente jamás en su vida se había hecho de gasolina robada, pero que ese día vio la oportunidad de obtenerla gratis y era alta la necesidad en ese entonces por la escasez del combustible- se pensó que el llamado “huachicol” iba a disminuir o desaparecer, craso error, porque no fue así.

Con todo y que lo ocurrido y las medidas que entonces tomó el gobierno entrante de López Obrador sirvieron para bajar los índices de robo de gasolina, hoy este delito día está en sus mejores tiempos e Hidalgo lleva meses en el primer lugar de incidencia.

Pero claro que el problema no es solamente en nuestra entidad. Reciente información indica que el año pasado fue el peor en nuestro país en lo que a robo de combustible se refiere, pues de 11 mil 37 tomas detectadas en el 2021, se pasó a 13 mil 946 en 2022. Al iniciar este gobierno se tenía el reporte de casi 15 mil tomas, que bajó hasta las citadas 11 mil en el 2020 y 2021.

De acuerdo a la información que emite la Gerencia de Estrategia y Sistemas de Seguridad y Monitoreo de Petróleos Mexicanos, el promedio diario de nuevas perforaciones de los ductos es de 33.6. Noé Cruz señala que la cifra alcanzada en los primeros cuatro años de este gobierno supera al que había sido el peor sexenio en cuanto a ordeña, pues con Peña Nieto el promedio diario alcanzó 19.9 perforaciones diarias.

Cruz Serrano informa que el número de perforaciones clandestinas descubiertas el año pasado a lo largo de los 17 mil kilómetros de ductos de Pemex fue récord para este gobierno, lo que explica por qué ese delito pasó de dejar 7 mil 200 millones de pesos como dividendos, a 18 mil 700 millones de pesos en los dos años recientes.

Nos sirve de consuelo que México no es el único país productor de petróleo que vive un grave problema con el robo de combustible a partir del picado de ductos –un negocio que representa 18 mil millones de pesos al año-: en Colombia fue un gran problema en los años 90; en África es tan común que en países como Nigeria y Somalia utilizan sistemas automatizados que generan alertas en el sitio exacto en donde se pretende pinchar un ducto.

Parece que la experiencia de esos países es la que se debe aprovechar en el nuestro, invertir en tecnología para la red de ductos, pues México es uno de los más deficientes en el tema de contar con alertas tempranas o generar alertas cuando se presente una fuga o salida no programada de volumen en ductos, aseguró un experto en la materia.

Pero mientras esto ocurre –en este gobierno o en el siguiente, o en el siguiente- el ilícito crece. Ciertamente, con el actual gobierno de Hidalgo parece que se ha retomado el inicial interés del gobierno federal. Se informa de un importante número de decomisos de combustible extraído ilegalmente, así como sujetos apresados, junto con vehículos y otros implementos. Que así sigan.

Por hoy es todo, nos leemos en la próxima entrega, pero Entre nos.

 

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Por: José Guadalupe Rodríguez Cruz

*Egresado de la UNAM como licenciado en Derecho y Diplomado por el Instituto de Administración Pública de Querétaro y por la Universidad Iberoamericana en Políticas Públicas. *Regidor Municipal en Tula, Secretario Municipal de Tula, Diputado local en la LVII y LIX Legislaturas en el estado de Hidalgo y Presidente Municipal Constitucional de Tula 2000-2003. *Autor del libro “Desde el Congreso Hidalguense” y coautor del libro “Tula... su Historia” *Director y fundador del periódico bisemanario “Nueva Imagen de Hidalgo”, que desde 1988 se pública en Tula, Hgo.


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ENTRE NOS... - José Guadalupe Rodríguez Cruz

*Egresado de la UNAM como licenciado en Derecho y Diplomado por el Instituto de Administración Pública de Querétaro y por la Universidad Iberoamericana en Políticas Públicas. *Regidor Municipal en Tula, Secretario Municipal de Tula, Diputado local en la LVII y LIX Legislaturas en el estado de Hidalgo y Presidente Municipal Constitucional de Tula 2000-2003. *Autor del libro “Desde el Congreso Hidalguense” y coautor del libro “Tula... su Historia” *Director y fundador del periódico bisemanario “Nueva Imagen de Hidalgo”, que desde 1988 se pública en Tula, Hgo.