El gobierno de Julio Menchaca en Hidalgo ha tenido un peso de maniobra política a través de la gestión de inversiones que desde la Secretaría de Desarrollo Económico, a cargo de Carlos Henkel, y en vinculación a la Unidad de Planeación y Prospectiva, que dirige Miguel Tello, han creado las condiciones para renovar la articulación del gobierno con los sectores productivos.
La inversión directa en la gestión del gobernador Menchaca Salazar ha concretado un paquete de 27 mil 562 millones de pesos, que enmarca que las condiciones de estabilidad social y ventaja competitiva para la inversión se han ido consolidando en Hidalgo. En línea recta, los resultados del Índice de Paz en México han dado fuerza al proyecto de Menchaca Salazar, que no puede dejar de lado que aún subsiste el trasiego de huachicol como mal endémico, acompañado del incremento del narcomenudeo en Hidalgo.
En estos momentos de auge político en el gobierno de Julio Menchaca no parecen existir límites a la naturaleza política en el dominio de Morena en Hidalgo. Sin embargo, existen sombras que han ido calando desde el gobierno federal de la presidenta Claudia Sheinbaum que merecen un escenario de reflexión a contra vector.
Carlos Juárez Cruz, director de la ONG Instituto para la Economía y la Paz, que lleva a cabo el índice de Paz en México, advirtió con el peso geoestadístico que Hidalgo ya empieza a tener impactos significativos en el aumento del narcomenudeo y cobro de piso. En ambos casos, las ponderaciones de Juárez Cruz incidían en que el gobierno del gobernador Menchaca Salazar no podía entrar en un proceso de meseta gubernamental y que lo logrado en el control a la delincuencia debía abrir un nuevo capítulo de investigación y control a través de reforzar la seguridad pública.
Las prescripciones de Carlos Juárez proponían que el escenario de paz y seguridad pública en Hidalgo se encuentra bajo amenaza y que cuando el río suena es que agua lleva; por lo que era el momento idóneo para que el gobierno de Julio Menchaca le diera un refuerzo a la estrategia de seguridad.
El trazo entre crecimiento económico y paz social queda reducido a los logros en materia de seguridad pública y equilibrio de las condiciones de integridad social, por lo que todo indica que la procuración e impartición de justicia y la seguridad ciudadana escalen a otro nivel en Hidalgo, y así como se presentó el Plan Hidalgo en materia de estabilidad económica frente a la beligerancia de la guerra de los aranceles desde Washington, de igual manera, se presente el nuevo Plan Hidalgo en materia de seguridad pública.
¿Cuáles serían las premisas de un nuevo Plan Hidalgo en materia de Seguridad Pública?
I. Investigación y prospectiva
Trazar un nuevo esquema de investigación policial es el vector que permite garantizar la prospectiva de estabilidad en los próximos años en Hidalgo. La Guardia Nacional de México ha iniciado en estos momentos delicados del combate a la delincuencia organizada, una reestructuración de sus procesos de investigación y ha realizado acuerdos con policías a nivel internacional.
II. El control de mando anti infiltración
Los hechos acontecidos en el gobierno de Clara Brugada en la Ciudad de México imponen un análisis de forma y fondo sobre la infiltración y la corrupción que debe marcar un arqueo constante de los protocolos de probidad de los cuerpos de seguridad y del staff de servidores públicos de mandos decisorios.
III. Un nuevo código de ética pública
Los problemas de nepotismo que se han sucedido a nivel nacional y en Hidalgo, deben trazar la creación de un nuevo código de ética pública apegado a sanciones y acordes a nuevas legislaciones que mantengan activo al Congreso local en relación a la administración pública.
Los límites de la naturaleza política están marcados por la probidad y control del Estado. Ha quedado demostrado en la presente administración de la presidenta Claudia Sheinbaum que en Morena “no son todos los que están, ni están todos los que son”.
