Morena se chamaqueó al PRI

MARTHA SÁENZ

La sesión de ayer transcurrió, una vez más, con discusiones minuciosas sobre la Ley Orgánica del Poder Legislativo, todo empezó porque al votar la Ley de Ingresos de 2019 Mayka Ortega Eguiluz y María Luisa Pérez Perusquía estaban muy ocupadas revisando temas con sus asesores cuando se mencionó rápidamente el registro para discutir el tema, con toda la experiencia de las diputadas, que repiten por segunda vez en el Congreso Local, se les pasó anotarse, para cuando pidieron la palabra por las reservas definidas por el Grupo Universidad era tarde.

Susana Ángeles Quezada dio lectura a los considerandos y artículos reservados para dar pie a la discusión en lo particular del dictamen sobre la Ley de Ingresos, enseguida Mayka Ortega Eguiluz dijo que “se estaba violentando la ley”. Continuó Asael Hernández Cerón para intentar darle la razón a las priistas a base de un largo discurso que maneja desde hace tiempo. Por el Grupo Universidad subió Roxana Montealegre Salvador para explicar que entendía lo que había sucedido porque el artículo en discusión era “enredado”.

Lo cierto es que los morenistas buscaron con toda la intención hacer rápida la sesión para evitar discusiones, pero las priistas les facilitaron todo con un error de minutos en el pleno, aunque también quedó claro que las reservas no fueron notificadas a la Comisión de Hacienda, o por lo menos no a todos los integrantes, tal como lo manifestaron la perredista Areli Rubi Miranda Ayala y la pesista Jajaira Aceves Calva.

Durante las pocas intervenciones Asael Hernández Cerón sostuvo que no se podía votar algo que no se conocía. Mayka Ortega regresó a quejarse del proceso legislativo para ventanear que Roxana Montealgre Salvador no había asistido a la Comisión de Hacienda, parece que a la morenista solamente le dieron hojitas para leer y recibir reflectores.

Lo más interesante fue que la facción del PAN se dividió entre Asael Hernández junto a Claudia Luna y en un segundo bloque Arely Maya Monzalvo con Morena, mientras el PES se adhirió a Morena en lo que parece una lectura nacional. Pero en las reservas Jajaira Aceves Calva optó por varias abstenciones y fue quien mayor énfasis puso en la falta de conocimiento de las decisiones de los morenistas, que ahora trabajan “en lo oscurito”.

La bancada de minorías se redujo a 9: 5 priistas, 2 panistas, 1 petista y 1 perredista, siendo esta última la de mayor relevancia por poder sostener que como parte de la Comisión de Hacienda no fue enterada de los cambios de última hora.

La gran objeción de Morena fue respecto del aumento de presupuesto que se dio a conocer después de la proyección, casi de última hora, pareciendo una estrategia mediática para ganarse el reconocimiento de la población por el trabajo de aumentar el presupuesto, noticia que por formas y trabajo corresponde al ejecutivo pero que se ha encargado de esparcir la bancada federal. Por otro lado, la estimación de impuestos no la encontraron congruente, cabe resaltar la coincidencia con los detalles poco explicados por Jessica Blancas Hidalgo, secretaria de Finanzas, durante comparecencia, pues dejó más dudas que explicaciones, y los “17 de Morena” junto a sus nuevos amigos esperaron pacientemente para dar su “veredicto”.

El Grupo Universidad buscaba aprobar algo que sólo ellos conocían, pero las priistas: fallaron, al ejecutivo le está costando el presupuesto de un año entero el error de una inútil facción.