Cuando, a mediados de la temporada, se destaparon escándalos en el seno de los Rieleros, que terminaron con una pelea entre el mánager Luis Carlos Rivera y Ricky Pedroza, nadie daba un cacahuate por los de Aguascalientes.
Para sorpresa de todos, el equipo del riel se reagrupó y obtuvo el quinto lugar, en la zona norte, con 30 triunfos y 31 derrotas; no conforme, estuvo a punto de eliminar a los finalistas Toros de Tijuana, tras llevar ventaja de 3 a 1, lo que les permitió calificar como los mejores perdedores, y luego darles pelea a los Mariachis de Guadalajara, que los eliminaron en seis emocionantes partidos, con victorias 9-7 y 8-6, y derrotas 14-7, 8-7, 9-6 y 10-3.
El importado Michael Wing (.345, 9 jonrones y 44 impulsadas), Marc Flores (.288, 8 y 36), y el veterano Eliezer Ortiz (.298, 3 y 27) cargaron con el peso ofensivo de la escuadra en la temporada, hasta que en la parte final recibieron la ayuda de los recién llegados Leonardo Regginato, Danry Vasquez, Henry Rodríguez y Jay Austin, así como el resurgimiento del veterano Francisco Córdoba.
En el picheo, Erik Leal (3-3 y 5.93) y Néstor Molina (1-4 y 3.67) sacaron la casta, auxiliados por Ernesto Zaragoza, Daniel Díaz y un buen bullpen, en el que destacaron Anthony Vizcaya y Jorge Rondón.
Rivera parece estar más a gusto en equipos modestos y no plagados de estrellas, como los Leones, y sabe exprimir lo mejor de sus recursos.
Así, pues, fue una buena temporada, que sienta las bases para que los Rieleros vuelvan a ser un equipo competitivo el año próximo.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
