Los Saraperos de Saltillo fueron una grata revelación durante la temporada regular, terminando en tercer lugar, con 36 ganados y 30 perdidos; por eso, resultó sorpresivo que fueran eliminados en la primera ronda, por unos Acereros que recordaron por qué fueron campeones en cinco trepidantes juegos.
La escuadra, comandada por Roberto Vizcarra, cayó por 5-4; ganó 4-2, pero en Monclova perdió 6-3, 3-2 y 3-1 en 10 entradas. Los lanzadores perdedores en esos dos últimos encuentros fueron relevistas que apenas regresaban: Mario Meza, quien había sido suspendido por utilizar sustancias ilegales en la bola, y Anthony Carter, que se había ido a los Juegos Olímpicos para conquistar la medalla de plata con Estados Unidos.
El equipo norteño se caracterizó, a lo largo de la temporada, por su buen bateo, y resaltaron Henry Urrutia, con .385, 12 cuadrangulares y 52 producidas, lo que le valió ser considerado como el más valioso; Kendris Vargas, con .319, 18 y 54, y Rainiel Rosario, quien se apuntó una nueva corona de jonrones con 20, además de un buen .323, con 43 empujadas.
Curiosamente, el mejor productor resultó un símbolo de la institución: Manny Rodríguez, con 55, además de terminar sobre la cifra mágica y obtener 11 cuadrangulares. Tampoco hay que olvidar al versátil Josuan Hernández, que compiló un elevado .372, con 7 cuadrangulares y 31 producciones.
En el pitcheo, su brazo confiable fue Miguel Peña, con 7-1 y 4.85 en carreras limpias. Orlando Lara quedó a deber con 3-7 y 6.68, al igual que Raúl Carrillo y Luis de los Santos.
En el relevo, Meza y Carter habían cumplido, hasta antes de los playoffs.
Aunque Saraperos será contendiente el año próximo, deberá mejorar su pitcheo.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
