Desde que se anunció que Luis Carlos Rivera sería el nuevo manejador de los Leones de Yucatán, hubo muchos inconformes, lo cual se notó durante la mayor parte de la temporada.
Pese a tener un buen equipo, los melenudos no acababan de despertar, y no fue sino hasta la salida de Rivera y la llegada de Gerónimo Gil que Yucatán repuntó, terminando con 66 victorias por 52 derrotas, llegando a la Serie del Rey.
A diferencia del resto de los equipos, los yucatecos fundaron su poderío en el pitcheo; sobre todo, en César Valdés. El dominicano tuvo un temporadón con 15 victorias por 2 derrotas, siendo líder en efectividad con 2.26 y 122 ponches. Lo seguía el cubano Yoanner Negrín, con 13, 6 y 3.22 en carreras limpias. El mexicano José Samayoa tuvo su mejor temporada, con 9, 5 y 4.05 en carreras limpias. Se incorporó Dustin Creenshaw y Andrés Ávila hizo buenos relevos. Al bat su mejor hombre fue Jonathan Jones, quien llegó de Laguna para convertirse en un valioso primer bat, con .353, 10 cuadrangulares y 55producidas. Luis Juárez volvió a ser un hombre importante con .319, 12 y 65, apoyado por José Aguilar (.308, 3 y 31). Al final, ayudó el regreso de Art Charles, no así el de Xavier Scruggs.
Para este año perderían a Valdés, pero la suspensión de la temporada nos dejó con las ganas de ver si repetirían el campeonato del 2018.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
