Evo Morales en el exilio en México promete volver a su natal Bolivia después de que lo obligaran a dimitir, en un claro golpe de Estado. ¿Cuáles son los puntos clave del golpe de Estado?
En primer término, la legitimidad de Morales se diluyó desde su presencia en el Movimiento al Socialismo (MAS), al grado que, ante la presión del ejército y policía en Bolivia, terminó solo, también abortado por sectores de la población que anteriormente habían apoyado su gestión.
Acto seguido, el contrapeso con la presión directa del gobierno de Washington y de los países miembros de la OEA creó un esquema aislacionista que en las pasadas elecciones marcaron un efecto de bloqueo tácito a la reelección de Morales, por lo que una vez forzada desde una modificación constitucional, creó una reacción externa suficiente para animar a sectores de oposición interna y replantear la estrategia hacia la dimisión del presidente.
Aunado a esta condición, no hubo una postura firme de Morales de denunciar y oponerse como figura legal y legítima del Poder Ejecutivo en Bolivia; fue timorato y poco eficaz en el manejo de comunicación frente al pronunciamiento abierto de golpe de Estado que llevó a cabo el General Williams Kaliman, cuestión que presupuso debilidad del mandatario y del mandato.
De acuerdo con la correlación de fuerzas no favorable para Evo Morales, también se encuentra el hecho de que haya expresado que se podía convocar nuevamente a elecciones ante las acusaciones de fraude, lo que era abiertamente una vacilación expresa de la validez del proceso electoral, mensaje erróneo y que evidenciaba los estragos de la reelección.
Esta suma de factores hizo infranqueable el camino para detener el golpe de Estado, lo que a la postre termina con Evo en el exilio y hace repensar que la sombra de los golpes de Estado vuelve a amenazar a las democracias, sean débiles o fuertes, como quedó claro en Bolivia.
Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.
