Una de las obras maestras del gran escritor norteamericano Philip Kindred Dick (1928-1982) fue El hombre en el castillo. Escrita en 1962, obtuvo el Premio Hugo a la mejor obra de ciencia ficción un año después.
Para quienes no la conozcan, se trata de una distopía que transcurre en un universo alternativo en el que Alemania y Japón ganan la Segunda Guerra Mundial y someten a los estadounidenses.
El cine ha adaptado algunas obras del autor con bastante éxito, tales como ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, que se convirtió en el clásico Blade runner, y El vengador del futuro. Era cuestión de tiempo para que la pantalla chica se interesara por el autor: los Estudios Amazon escogieron The man in the high castle para una serie cuyas cuatro temporadas se pueden ver en esa plataforma.
La serie narra la historia de Juliana Crain (Alexa Davalos), una chica de San Francisco que se ve involucrada con la resistencia cuando su media hermana es asesinada por los japoneses, por contrabandear películas subversivas que hablan de mundos alternos. Su novio judío, Frank Frink (Rupert Evans), es detenido y sus familiares son asesinados por el sanguinario inspector Kido (Joel de la Fuente).
Pero no todos los nipones son malos: el ministro de Comercio, Nobosuke Tagomi (Cary Hiroyuki Tagawa), quiere una solución pacífica. Todo lo contrario a los nazis: John Smith (Rufus Sewell) utiliza a espías como Joe Blake (Luke Kleintank) para tratar de capturar al hombre del castillo Hawthorne Abedsen (Stephen Root).
Se usan figuras históricas como Hitler, Menguele, Hoover, Hirohito y muchos más, de una manera inteligente. Los 40 episodios de The man in the high castle son una buena opción para esta temporada de reclusión.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
