Luego de dos años de hacer mancuerna con sus hermanos mayores, Los Diablos Rojos, y salir bicampeones de la Liga Invernal, los Guerreros de Oaxaca participan en solitario esta temporada bajo el mando de José Luis Sandoval, quien recibe una nueva oportunidad tras su fracaso con los escarlatas.
Ahora lo hacen con autoridad, pues luego de triunfar el viernes por blanqueada de 6 a 0, les empataron el liderato, aunque lo perdieron al ganar los Diablos la serie por 6 a 3 y 11 a 5.
El zurdito Ariel Gracia dominó a sus ex compañeros, permitiéndoles apenas dos imparables, con cinco ponches, aunque otorgó cuatro pasaportes. Sus relevistas, Jesús Valenzuela y Juan Francisco Méndez, no permitieron mayores libertades.
Los Guerreros se fueron arriba desde la primera entrada con imparable productor de Ismael Martínez, y explotaron al derrotado Filiberto Báez con un racimo de cinco en la cuarta entrada con imparable productor de dos carreras, Luis Fernando Medina, y otra de Ismael Martínez. Ambos ya jugaron con los escarlatas.
En el juego sabatino, luego de cuatro ceros de Luis Payán, los Diablos hicieron tres en la quinta, destacando un cuadrangular de Julián Ornelas y serpentina de Carlos Morales para triunfar por seis a tres.
Y en el decisivo dominical atacaron temprano a Fernando Corrales con cuatro carreras en la primera entrada, por un jonrón de Yosamot Cota, y lo explotaron en la cuarta con un gran slam de Daniel Jiménez.
El triunfador fue Luis Fernando Miranda, pese a tolerar palos de vuelta entera de Luis Fernando Medina, ambos sin gente en los senderos.
Así pues, estos Guerreros tienen suficiente talento propio para pelearle a los Diablos el tricampeonato, aunque, a fin de cuentas, todo terminaría en familia.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
