Con varias semanas de retraso, la Liga Mexicana anunció los nombramientos de los peloteros más destacados de la temporada que acaba de terminar. Curiosamente, ninguno de ellos pertenece a los campeones Toros de Tijuana.
El enjundioso Ricky Rodríguez, quien había sido el campeón productor de la Liga Invernal, fue seleccionado como novato del año por su destacada actuación con el bat y con el guante para los Pericos de Puebla, con .304, 11 cuadrangulares y 72 producidas, además de cubrir la primera y el jardín izquierdo. Su compañero de equipo, Jesús Arredondo, fue el retorno del año, con .332, 15 cuadrangulares y 87 producidas.
Por segundo año consecutivo, el norteamericano Chad Gaudin fue el relevista del año, sólo que esta vez con los Acereros de Monclova con 29 rescates en 33 oportunidades, para terminar como líder de la especialidad con 2.93 en carreras limpias.
El venezolano Néstor Molina fue el mejor pitcher del año con 12 triunfos por 3 derrotas, y un microscópico 1.89 en carreras limpias para el Águila de Veracruz, que se mudará a Nuevo Laredo la próxima temporada.
El manager del año fue Homar Rojas, quien llevó a los Rieleros de Aguascalientes a la postemporada con 64 triunfos y 46 derrotas con un modesto equipo. Conviene recordar que Rojas fue despedido de los Acereros, a quienes llevó a la final hace dos años.
Otro elemento de los Rieleros, Jesús Castillo, El Jesse, fue elegido el pelotero más valioso al batear .342, con 20 cuadrangulares y 82 carreras producidas.
Se trata de nombramientos justos que nadie puede poner en duda, pues fueron logrados con arduo trabajo.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
