Uno de los estrenos más interesantes de la semana es "Upgrade", una cinta australiana de ficción del actor Leigh Whanell, al estilo de Robocop de Paul Verhoeven o del Cyborg de Jean Claude Van Damme.
El guión del propio realizador narra la historia de Grey (Logan Marshall Green), un mecánico especializado en autos clásicos en un futuro cercano que está casado con la bella programadora, Asha (Melanie Vallejo). Tras entregar un auto al magnate Eron (Keen Harrison Gilberston), la pareja es salvajemente asaltada por una pandilla; ella es brutalmente asesinada, mientras que él queda convertido en un parapléjico incapaz de valerse por sí mismo. Es entonces que Eron le ofrece una solución: implantarle un chip llamado steam que no solamente le permitirá recobrar el movimiento, sino convertirse en una máquina mortal. Sediento de venganza, se dedica a buscar a los responsables de la muerte de su esposa, y cazarlos uno por uno.
Whanell, quien se había dedicado mayormente a la actuación, se pone por detrás de la cámara por primera vez con un buen sentido de la acción, pero dotando a la cinta de momentos humorísticos cuando el dispositivo deja de funcionar en medio de las peleas.
Upgrade, cuya traducción vendría a ser "Mejora", resulta una entretenida y violenta cinta de ciencia ficción que será del agrado de los fanáticos del género, pese a que no haya nombres conocidos en el reparto.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
