Cuando se anunció la mudanza de los Diablos Rojos al pequeño Estadio Fray Nano, ya se sabía que era una medida provisional. Luego de ser unos inquilinos incómodos del Foro Sol, que los relegaba cuando había conciertos, el acabose ocurrió con el anuncio del regreso de la Fórmula Uno. OCESA dio por terminado el convenio.
Por eso los fanáticos al rey de los deportes recibimos con beneplácito el anuncio de la construcción de un nuevo estadio, que se llamaría Harp Helú, en honor a su patrocinador
El Fray Nano, bautizado así en honor a Alejandro Aguilar Reyes, uno de los fundadores de la Afición y promotor del béisbol nacional con una capacidad de poco más de 4,500 personas, resultó insuficiente para el juego inaugural contra los Toros de Tijuana en el 2015, que por cierto perdieron los escarlatas, en algo que se volvió habitual hasta el último año.
Solamente había tres opciones, palco, butaca y grada, que además variaban de precio según el día de la semana, pero que eran mucho más caros que el Foro Sol, que mantuvo las mismas tarifas desde el 2000.
Además como un golpe más a los aficionados de la tercera edad, que entraban gratis en el Foro Sol, aquí solamente recibían descuento del INAPAM el primer año, luego se limitó a un día a la semana, hasta que desapareció por completo.
Lo cierto es que el pequeño estadio no le trajo suerte a los pingos. La primera temporada, luego de ocupar el liderato, fueron eliminados en el primer playoff por Tijuana.
Las dos temporadas siguientes ni siquiera llegaron a la post temporada y en los dos mini torneos de este año fueron eliminados por los Tigres y por los Guerreros.
Como premio de consolación en la temporada invernal se coronaron tres años seguidos, hasta que este año se suspendió.
Conviene señalar que en los Juegos de Grandes Ligas, o en las series contra los Tigres, se colocaron gradas provisionales en el jardín derecho, y al final, unos pocos lugares en el jardín central.
Desde ahí atestiguamos la eliminación de los Diablos, una tarde de sábado lluviosa ante los Guerreros de Oaxaca, ante un estadio lleno que había sufrido con la reventa.
Se anuncia que ahora sí el nuevo estadio estará listo par la inauguración de la temporada 2019, y que será incluso sede del Juego de Estrellas.
Sin embargo, no puede uno evitar la nostalgia de no volver a ver un juego de Liga Mexicana en el acogedor Fray Nano.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
