Después de un efervescente proceso de transición en el Congreso local y del ruido alrededor del papel de Humberto Veras Godoy en su papel de presidente de la mesa directiva y coordinador de la bancada morenista, el diputado electo ha decidido renunciar al cargo.
Los motivos no quedaron claros, el argumento de Veras Godoy resulta incompleto, pues el diputado afirmó que necesitaría más tiempo para presidir una nueva comisión, de la que tampoco se sabe el nombre ni el objetivo. En su lugar, ha quedado como representante del partido el diputado Ricardo Raúl Baptista González.
Resulta complicado pensar en el origen de estas decisiones que, voluntarias o no, evidencian los choques entre los morenistas y dejan la mesa puesta para dudar sobre quién hace estos pequeños “ajustes” dentro del partido y con qué intención.
El asunto resulta muy sospechoso, sobre todo por las razones detrás de las jugadas de Veras Godoy, quien parece estar escuchando a una voz invisible e indecisa que deja entrever lo nuevo que es en el mundo político.
Esperemos que pronto se puedan ver caminos más claros para Morena en el Congreso y que todos los cambios que están realizando armonicen y permitan hacer de ese partido una verdadera contrafuerza que sume a la transformación del México que prometió.
