Frente Amplio por México

Las principales corcholatas de López Obrador en la carrera por la sucesión ya tienen una nueva competidora, la hidalguense Xóchitl Gálvez, quien podría darle gran batalla sobre todo a Claudia Sheinbaum.

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Por: José Guadalupe Rodríguez Cruz

*Egresado de la UNAM como licenciado en Derecho y Diplomado por el Instituto de Administración Pública de Querétaro y por la Universidad Iberoamericana en Políticas Públicas. *Regidor Municipal en Tula, Secretario Municipal de Tula, Diputado local en la LVII y LIX Legislaturas en el estado de Hidalgo y Presidente Municipal Constitucional de Tula 2000-2003. *Autor del libro “Desde el Congreso Hidalguense” y coautor del libro “Tula... su Historia” *Director y fundador del periódico bisemanario “Nueva Imagen de Hidalgo”, que desde 1988 se pública en Tula, Hgo.

Como ha sido en los últimos cinco años, otra vez –seguramente de manera involuntaria- el presidente López Obrador marcó la agenda pública. En las redes y en todos los medios de comunicación el nombre de Xóchitl Gálvez creció como nunca, ni ella misma lo imaginó, al grado de cambiar de plan y ahora, en lugar de buscar el gobierno de la CDMX, la senadora hidalguense va por la presidencia de la República.

Todo ello a raíz del ruido que se hizo porque Obrador no dejó entrar a Gálvez a la mañanera en Palacio Nacional tras la orden que dictó un juez para que pudiera refutar los señalamientos que meses atrás había hecho el presidente en cuanto a que la panista había propuesto terminar con los apoyos a los adultos mayores; ella negó tal aseveración, exigió el derecho de réplica, AMLO dijo que se lo daría siempre y cuando se lo ordenara una juez y así ocurrió, pero cuando la senadora llegó a Palacio, la puerta nunca se la abrieron y vino el escándalo.

Lo cierto es que el inesperado fenómeno ya preocupa a Morena y a sus corcholatas, que siguen recorriendo el país en claro proselitismo, pero el INE –ya alineado con AMLO- dijo que no hay tal y que las cosas marchan apegadas a Derecho, realidad que cualquier novel estudiante de leyes comprobar que no es así. Pero ese no es el tema porque, además, en breve panistas, priistas y perredistas estarán también violando la ley con su Frente Amplio por México.

El caso es que la sucesión ya se puso caliente a poco menos de un año de la elección, escenario que claramente fue creado por López Obrador, pues en la tribuna de la mañanera y desde hace meses comenzó a hablar del proceso, Morena acató la orden del supremo y ya marcó los tiempos para sus corcholatas para no esperar hasta noviembre, como la ley lo establece.

Enfrascados en sus luchas intestinas, los partidos de la oposición (sobre todo el PRI) no atinaban a darle la batalla a Morena, pero apareció la de Tepatepec y las cosas se pusieron buenas. Hoy AMLO está convertido en el mejor propagandista de la senadora, quien es mencionada una y otra vez, siempre para agredirla, descalificarla y gracias a ello, la panista sube y sube.

La oposición ya marcó tiempos para designar a su candidato y de los 15 mencionados inicialmente hoy quedan Enrique de la Madrid, Beatriz Paredes, Xóchitl Gálvez, Santiago Creel, Silvano Aureoles y algunos otros despistados que no tienen posibilidad alguna de ganar un proceso que va a incluir encuesta y 150 mil firmas, principalmente.

No puedo pensar en algún motivo que eche abajo el triunfo de Xóchitl y, si se suma la sociedad civil y algún partido como Movimiento Ciudadano, es real un escenario competido en donde resultaría muy aventurado dar por hecho el triunfo de Claudia Sheinbaum, si damos por descontado que es la corcholata favorita del presidente, pero a decir verdad no ha levantado sus bonos en esta primera semana de campaña que dicen que no es campaña.

La opción es que los partidos de oposición cierren filas alrededor de Gálvez, que la sociedad civil haga lo mismo, tal como lo hicieron para aquella tumultuosa marcha en defensa del INE realizada hace algunos meses en la capital del país y en casi cien ciudades más del territorio nacional.

Claro que el camino está lleno de intereses, contratiempos y luchas intestinas entre los partidos, como la que todavía no supera el PRI a nivel nacional y en Hidalgo de manera específica. ¿Se pueden imaginar qué harían los Osorio o los Fayad ante un eventual triunfo del Frente Amplio por México? Solicitarían su inmediata reincorporación al tricolor para no quedarse afuera del tren de la victoria.

El camino es largo, pero ha surgido una ruta inesperada y que nos tiene ya ante el probable escenario de una lucha parejera entre dos mujeres para que una de ellas se convierta en la próxima presidenta de México.

Por hoy es todo, nos leemos en la próxima entrega, pero… Entre nos.

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Por: José Guadalupe Rodríguez Cruz

*Egresado de la UNAM como licenciado en Derecho y Diplomado por el Instituto de Administración Pública de Querétaro y por la Universidad Iberoamericana en Políticas Públicas. *Regidor Municipal en Tula, Secretario Municipal de Tula, Diputado local en la LVII y LIX Legislaturas en el estado de Hidalgo y Presidente Municipal Constitucional de Tula 2000-2003. *Autor del libro “Desde el Congreso Hidalguense” y coautor del libro “Tula... su Historia” *Director y fundador del periódico bisemanario “Nueva Imagen de Hidalgo”, que desde 1988 se pública en Tula, Hgo.


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ENTRE NOS... - José Guadalupe Rodríguez Cruz

*Egresado de la UNAM como licenciado en Derecho y Diplomado por el Instituto de Administración Pública de Querétaro y por la Universidad Iberoamericana en Políticas Públicas. *Regidor Municipal en Tula, Secretario Municipal de Tula, Diputado local en la LVII y LIX Legislaturas en el estado de Hidalgo y Presidente Municipal Constitucional de Tula 2000-2003. *Autor del libro “Desde el Congreso Hidalguense” y coautor del libro “Tula... su Historia” *Director y fundador del periódico bisemanario “Nueva Imagen de Hidalgo”, que desde 1988 se pública en Tula, Hgo.