Luego del derrame de combustóleo en un emisor de la Refinería Miguel Hidalgo a inicios de esta semana, el diputado por el distrito 14 de Tula de Allende, Ricardo Baptista González, refirió que ya sostuvo pláticas con el gerente del complejo, quien confirmó el hecho e incluso le precisó que ya eran realizadas maniobras de limpieza.
No obstante, el asambleísta del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) consideró que ya debe atacarse el problema de fondo y no solo las afectaciones, pues recordó cómo la zona ha sido catalogada como la más contaminada inclusive de América Latina.
Aunque para ello, explicó que se requiere una declaratoria de emergencia la cual ha sido pedida desde hace tiempo pero no ha llegado, a lo que consideró que si bien se debe a las rutas a seguir, señaló que estas son muy largas, además que interviene el factor dinero, que para el caso serían necesarios varios millones, apuntó.
Asimismo, contrastó que proyectos como la planta tratadora en Atotonilco de Tula iniciada por el presidente Felipe Calderón Hinojosa e inaugurada por Enrique Peña Nieto no sirve ni abona en una mejora y por el contrario significa, dijo, un problema más.
De lo anterior, adelantó que llevará ambos temas, contaminación y derrame, la comisión de medio ambiente del Congreso local para que sea elaborado un asunto legislativo en la materia, sin que precisara alguno en específico; además de que por su parte buscará una reunión con encargados del complejo propiedad de Petróleos Mexicanos (Pemex) para pedir respuestas e informes detallados.
En ese sentido, acusó que hubo una nula acción al inicio del incidente por parte del gobierno local, de quien dijo está facultado para realizar monitoreos de descargas y orquestar desalojos poblacionales de ser necesario, hecho que recordó no ocurrió y atribuyó a un desconocimiento o ignorancia del ayuntamiento.
