Uno de los estrenos más esperados de la temporada es El Guasón, una singular cinta de Todd Phillips acerca de uno de los enemigos más famosos de Batman, que ya había sido interpretado por César Romero, en la serie televisiva; Jack Nicholson, el oscareado Heath Ledger y Jared Leto, en la pantalla grande.
Pero, en este caso, al guión del realizador y de Scott Silver no le interesa el mundo de los superhéroes, sino presenta el aspecto humano de Arthur Fleck (un espléndido Joaquin Phoenix), un joven enfermo que se gana la vida como payaso en una caótica Ciudad Gótica, debido a la huelga de los basureros y otros servicios.
Joaquin Phoenix tiene una actuación notable como un hombre que ha sufrido abusos desde pequeño y ha sido educado por su alienada madre, Penny (Frances Conroy), como una especie de moderno Garrick.
El director de la trilogía ¿Qué pasó ayer? abandona el terreno de la comedia para emprender su filme más ambicioso con este estudio acerca de la locura, bien apoyado por Robert De Niro como el oportunista presentador televisivo Murray Franklin y Brett Cullen como el millonario Thomas Wayne, el padre del hombre murciélago.
The Joker resulta, pues, un filme atípico a contracorriente de las producciones de superhéroes, que debe verse como la trágica historia de un loco, que lo único que quería era hacer reír a la gente, para hacer del mundo un mejor lugar.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
