El diputado Alejandro Enciso Arellano afirmó categórico que es responsabilidad de todos formar una niñez saludable, pero sobre todo respetada, garantizando sus derechos humanos en todo momento.
Lo anterior, al presentar una iniciativa para fortalecer la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes de Hidalgo, a fin de garantizar su protección como consumidores vulnerables.
En su exposición de motivos, el legislador lamentó que en este siglo XXI la esclavitud infantil sea un problema presente en la sociedad, con diversas formas modernas, tales como víctimas de trata, forzados a ejercer la prostitución, a realizar actividades ilegales como la mendicidad organizada o el tráfico de drogas, entre otros.
“Esta cruda realidad nos llama a seguir impulsando reformas legales para cumplir y garantizar el principio del interés superior de la niñez y el ejercicio pleno de sus derechos humanos”, dijo.
Agregó: “Es por ello que las diputadas y diputados integrantes del Grupo Plural Independiente presentamos esta iniciativa que tiene como objetivo que los menores de edad tengan el derecho a ser protegidos en su calidad de consumidores vulnerables”.
Esto significa que todas las niñas, niños y adolescentes, en su calidad de consumidores como población vulnerable, tienen derecho a recibir por parte de los proveedores toda la información clara, comprensible y pertinente para tener en cuenta los datos relevantes y suficientes, y así poder elegir con conocimiento de causa la adquisición de un producto o servicio.
“Todas las niñas, niños y adolescentes, como consumidores tienen derecho a tomar decisión fuera de cualquier media de acoso, coacción, influencia indebida o información engañosa, al momento de adquirir algún un producto o servicio”, indicó.
Otro de los aspectos que busca garantizar dicha iniciativa, es que las niñas, niños y adolescentes como consumidores vulnerables tengan derecho a una protección específica contra toda publicidad engañosa, abusiva y violenta, métodos comerciales coercitivos y desleales, así también contra prácticas y cláusulas abusivas o impuestas en el suministro de productos y servicios.
“Si bien estamos viviendo en un mundo de libre mercado, donde los niños en su calidad de consumidores están adquiriendo un poder en la toma de decisiones, debemos legislar para protegerlos, empoderarlos y que sean tratados con respeto, equidad y dignidad hacia su persona”, finalizó.
