Redacción
El estado de California, Estados Unidos, entregó licencias de conducir a más de 860 mil inmigrantes, en el periodo que abarca del 1 de enero de 2015 hasta este último mes de 2016. Lo anterior, luego de la entrada en vigor la medida que permite expedición sin considerar el estatus migratorio del solicitante.
El Departamento de Vehículos Motorizados de California (DMV) dio a conocer una actualización de dicho trámite en el que es considerado el estado con mayor número de inmigrantes en ese país. Como ejemplo está la cantidad de licencias emitidas en noviembre: 14 mil.
Las modificaciones a la ley han permitido a los indocumentados salir de la sombra y conducir con seguridad en sus vecindarios. Pero con la llegada de Donald Trump a la presidencia de EU, dicha legislación es sometida a nuevos análisis.
Hay temor entre los migrantes de perder el documento si la ley es modificada, para empatarse con las promesas de campaña del presidente electo, que se caracterizaron por la dureza en materia migratoria.
Otro temor es que las autoridades federales los deporten si logran acceder a la información del DMV, pues las agencias de aplicación de la ley, incluyendo el Servicio de Inmigración y Aduanas, pueden solicitar información sobre la licencia de conducir, aunque dicha información no precisa el estatus migratorio del solicitante.
Para calificar y obtener una licencia de conducir bajo la ley AB60, los aspirantes deben probar su identidad y residencia en California y aprobar un examen escrito y un examen de conducción, además de presentar huellas dactilares y mostrar póliza de seguro, entre otros requisitos.
