Respecto a la transición que se planea de procuraduría a fiscalía, para dejar el grupo de tres entidades que no lo ha hecho, Habib Nicolás, durante su comparecencia en el Congreso, compartió que únicamente nueve municipios han avalado el acuerdo en la materia, por lo que él y algunos diputados llamaron a los cabildos restantes a acelerar su proceso de discusión para evitar demoras.
A propósito de tardanzas, el titular de la PGJEH explicó que si no se etiqueta recurso para el siguiente presupuesto de egresos: 2022, se podría perder un año de transición ya que se necesitaría esperar hasta 2023 para comenzar otra vez; por lo que pidió hacer una revisión en breve en el órgano hacendario.
Sin embargo, evitó compartir una cifra estimada para la migración y solo acotó que si no se tienen los recursos será un tema complejo ya que no solo es un cambio de nombre de la procuraduría: “Es tema de recursos, sí; pero si no hay sería un plan B que es dar el cambio y conforme se tenga suficiencia presupuestaria resolver poco a poco”.
En más del procedimiento, explicó que una vez publicada la reforma en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo (POEH) deberá comenzarse el proceso como definir la situación de los muebles, inmuebles y personal, pues de los primeros dos explicó que la PGJEH no posee ninguno y deberá tramitarse su traspaso.
Mientras que de los trabajadores compartió que será necesario hacer un esfuerzo para garantizar sus derechos, ya que actualmente dependen del gobierno estatal y con la fiscalía deberán ser recontratados, pero ello significaría vulneraciones como perder antigüedad u otras prestaciones y se quiere evitar.
Asimismo, el nuevo ente deberá convertirse en una persona moral y darse de alta en el Servicio de Administración Tributaria (SAT), además de fortalecer la actual área administrativa para que pueda hacerse responsable de lo anterior pues sería insuficiente.
Aunque para comenzar el tránsito es necesario el requisito de publicación y después habrá 30 días para crear una comisión interinstitucional en la que estarán los diputados y otros sectores: “Debe haber orden en cómo abordar los temas”, dijo, al asentar que tienen que aprovechar la ventana para tener la fiscalía.
Ante ello, expresó que los retos son muchos y más porque la violencia no baja, pero la meta es que surja un nuevo ente sin antecedentes de complicaciones: “Si no se tienen los recursos solo se cambiará el nombre, pero es más que eso, es una reestructuración, ya que el anterior reglamento de 2016 resultaba desfasado”, finalizó.
