Ser y Devenir 43

El dualismo cósmico y el equilibrio existencial de los contrarios, la dialéctica prehispánica entre el ser y el devenir, i.e., lo inmutable reside en lo mutable y lo mutable reside en lo inmutable. En el caso de la moral, no hay bien ni mal absoluto. El bien tiene algo de mal y el mal tiene algo de bien. Difícil comprenderlo, y sobre todo explicarlo, para una mente occidental.

—Pero los mexicanos también somos occidentales —escucho la crítica de mi hermano, quien regresa a mi cabeza con más fuerza.

—Súmale la variable prehispánica.

—¿Eso cambia nuestra naturaleza occidental?

—Cambia el concepto de occidente.

La fusión a la fuerza entre la cosmovisión precortesiana y el universo judeocristiano generó múltiples significados sobre ambos, diversas formas de autointerpretación y la configuración mestiza de los símbolos. La estética se implantó al modo de los conquistadores y la ética su confirmación como medio de control, e.g., la vida de un indígena no valía lo mismo que la de un español, por lo tanto, era malo matar a un español, pero no era malo (o no tan malo) matar a un indígena. ¿Ambos son occidentales? ¿Y quién era más occidental, el criollo o el peninsular? En términos políticos el peninsular, en términos geográficos, el criollo. Porque sólo después de Estados Unidos y Canadá, México es el país más occidental del mundo. Aunque aquí “más occidental” es un accidente adjetivo y no sustantivo.

De pronto me encuentro platicando sólo con Samantha, su banda duerme agotada y en el color de la noche se siente la magia. Los dos miramos la fogata.

—Te busca la ley ¿verdad? —me pregunta y quedo cabizbajo—. No te preocupes. A todos nos buscan.

—¿Cuál es tu historia?

—No querrás saberla.

—¿Por qué dices eso?

—Demasiada violencia.

—Perdón por preguntar.

—Al contrario. Nadie me pregunta.

Se pone de pie, camina hacia las escaleras y observa la luna por uno de los respiraderos; su rostro reflexivo y su silueta iluminada como una estatua griega. Por primera vez en mi vida siento ganas de abrazar a una niña. ¿Qué me pasa?

—Huí de casa —rompe el silencio en un suspiro—. Mi padre murió cuando yo era muy pequeña y mi madre se casó con un monstruo.

No sé qué decir, pero siento su dolor. Un silencio entre los dos.

—¿Y tú? —me pregunta—. ¿Por qué te busca la ley?

—Me escapé del reformatorio.

—¿Y por qué estabas ahí?

—Mi padre era el monstruo.

Sus ojos comprenden, ella también ha luchado contra la fuerza bruta y nos reconocemos como sobrevivientes.

—¿Me abrazas? —me pregunta.

—¿Yo?

—Eres el único que está despierto.

—Bueno —digo luego de una pausa, me pongo de pie y no sé qué hacer.

—Ven.

Voy, llego hasta ella y sigo sin saber qué hacer.

—¿Para qué quieres que te abrace? —pregunto nervioso.

—Un abrazo repara el alma —me dice y me abraza muy fuerte.

Efectivamente, mi cuerpo abandona paulatinamente su dolor y mi espíritu se reconstruye lentamente. Siento que el universo está completo. Pero la calma de la madrugada se interrumpe con un fuerte golpe en la puerta, un mazo la derriba y la luz del exterior ilumina parte del sótano. Samantha y yo nos arrinconamos con el resto de la banda en la esquina menos alumbrada.

Entran cuatro hombres armados, bajan las escaleras y uno de ellos grita bestialmente, amenazándonos:

—¡Ahora sí ya se los llevó la chingada, malditos escuincles!

 

Continúa 44

Por: Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".






EL INDIO FILÓSOFO - Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".