Trump inicia ofensiva contra México

En 2005 en Mar del Plata, Argentina, mientras el presidente Vicente Fox defendía junto a George W. Bush el Tratado de Libre Comercio de las Américas (ALCA), se construía el muro fronterizo entre México y Estados Unidos, al que califiqué como “muro de la indignación”. Entonces, el presidente Fox no dijo nada por esto, es más: defendía al presidente Bush frente a los que para él eran presidentes populistas latinoamericanos.

Hoy, el muro que comenzó a construirse en los años noventa del siglo XX vuelve a ser noticia; esta vez porque no sólo pretende detener el flujo de inmigrantes ilegales a Estados Unidos sino también de mercancías y capitales, poniendo fin al sueño americano de México y al libre comercio. Con ello, Trump ha devuelto a México a su realidad latinoamericana, de la cual se venía alejando en las últimas décadas, cediendo su espacio a Brasil, Argentina y Venezuela dentro de la geopolítica regional.

Pero las cosas no podían ser peor para el presidente Enrique Peña Nieto: los escándalos de corrupción, sus fallidas reformas económicas y los desaciertos en la implementación de la apertura del mercado de los hidrocarburos le han provocado el rechazo de la población; y como si eso fuera poco, el gobierno que durante años fuera el principal apoyo para el mexicano, ahora le da la espalda y lo pone al borde del precipicio, lo que nunca imaginó que pasara.

A los esfuerzos mexicanos por salvar las relaciones comerciales con Estados Unidos, que durante los últimos treinta años han logrado construir cediendo frente a sus propuestas, les ha llovido una avalancha de amenazas por parte del presidente Donald Trump, las cuales ahora han desatado una tormenta cuyo desenlace aún es impredecible, tanto como el impredecible Donald Trump.

Cuando todo parecía indicar que la tormenta por la llegada de Trump al poder comenzaba a amainar para México, luego del anuncio de la visita del presidente Enrique Peña Nieto a Washington el próximo 31 de enero, para lo cual el canciller, Luis Videgaray, y el secretario de Economía, Idelfonso Guajardo, se habían trasladado a Washington, el presidente Donald Trump jaló del gatillo de su Twitter para darle un tiro de gracia a las relaciones entre México y EU.

Primero, Trump planteó que Estados Unidos tiene un déficit comercial de 60 mil millones de dólares con México, por lo que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ha sido un acuerdo unilateral desde su entrada en vigor, afectando los empleos y las empresas en su país.

En su segundo tuit, el magnate escribió: “@realDonaldTrump of jobs and companies lost. If Mexico is unwilling to pay for the badly needed wall, then it would be better to cancel the upcoming meeting” (Si México no está dispuesto a pagar el tan necesario muro, entonces sería mejor cancelar la reunión prevista);luego dijo que “Mientras México no trate a Estados Unidos de manera equitativa y con respeto, una reunión es estéril”. Esto provocó que Peña Nieto cancelara la reunión en un gesto de dignidad.

De este modo, Donald Trump ha puesto en marcha el enfrentamiento directo con México y su gobierno, sin que quede algo por rescatar. Sus amenazas de la construcción del muro fronterizo, el cual pagaría México a través de un impuesto del 20% a las importaciones, así como la expulsión de millones de mexicanos indocumentados prometida, ponen prácticamente fin a la esperanza de renegociar el TLCAN, el cual atrajo a México las armadoras de autos del planeta.

Con ello, el compromiso de Peña Nieto de hacer que la economía mexicana creciera a tasas superiores al 5% se quedará para la historia y el crecimiento alcanzado en su sexenio será menor al 2%, en promedio, haciendo de su retórica y sus reformas un triste recurso entre los ciudadanos, sobre todo en el 38% de los electores que apoyaron su elección. Pero quizá lo peor de todo pueda ser la salida de empresas y la pérdida de miles de empleos; la llegada de millones de mexicanos indocumentados y el incremento de la delincuencia, del crimen organizado, problemas sociales que pueden llevar al país a una crisis social.

No obstante, en la diplomacia la reciprocidad es el arma por excelencia entre los países. Más que lamentar que Donald Trump esté haciendo realidad sus promesas, en México se deberían de dar pasos para recuperar la independencia total respecto a Estados Unidos, poniendo fin a la colaboración dentro de la Iniciativa Mérida, por ejemplo, devolviendo equipos, helicópteros y aviones que sólo han servido de medios para controlar al país.

Lamentablemente, mientras México sigue insistiendo en conducirse como parte de los países desarrollados del norte, intentando salvar las relaciones con Estados Unidos, olvida al resto de Latinoamérica y el Caribe, que al igual que nuestro país serán afectados por la nueva política comercial y de inmigración que implementará Donald Trump.

La integración regional con Estados Unidos y Canadá parece haber llegado a su fin, pese a los esfuerzos que se hagan para salvarla. Sin duda, este es el mejor momento para hacer un frente común con los países de América Latina y el Caribe, para volver los ojos al sur y dejar de esperar migajas del norte, hasta hoy resumidas en un mercado para las exportaciones nacionales y una puerta de salida para millones de mexicanos que no han recibido una oportunidad de desarrollo en México.

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Por: José Luis Ortiz Santillán

Economista, amante de la música, la poesía y los animales. Realizó estudios de economía en la Universidad Católica de Lovaina, la Universidad Libre de Bruselas y la Universidad de Oriente de Santiago de Cuba. Se ha especializado en temas de planificación, economía internacional e integración. Desde sus estudios de licenciatura ha estado ligado a la docencia como alumno ayudante, catedrático e investigador. Participó en la revolución popular sandinista en Nicaragua, donde trabajó en el ministerio de comunicaciones y de planificación. A su regreso a México en 1995, fue asesor del Secretario de Finanzas del gobernador de Hidalgo, Jesús Murillo Karam, y en 1998, fundador del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.


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CONTEXTO ECONÓMICO GLOBAL - José Luis Ortiz Santillán

Economista, amante de la música, la poesía y los animales. Realizó estudios de economía en la Universidad Católica de Lovaina, la Universidad Libre de Bruselas y la Universidad de Oriente de Santiago de Cuba. Se ha especializado en temas de planificación, economía internacional e integración. Desde sus estudios de licenciatura ha estado ligado a la docencia como alumno ayudante, catedrático e investigador. Participó en la revolución popular sandinista en Nicaragua, donde trabajó en el ministerio de comunicaciones y de planificación. A su regreso a México en 1995, fue asesor del Secretario de Finanzas del gobernador de Hidalgo, Jesús Murillo Karam, y en 1998, fundador del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.