Que a pocas semanas de su llegada a la dirigencia del CDE PRI Hidalgo, a Leoncio Pineda y Erika Rodríguez ya “se les fueron las riendas” de la estructura, pues hay algunos cenecistas defendiendo la honra intachable del delegado federal de la SEDESOL. Se trata de una posición política oficial ante las denuncias de los últimos días, pero si no tiene la venia de la dirigencia quiere decir que no cuenta con autoridad sobre la estructura.
Que un importante grupo de periodistas hidalguenses anda preocupado porque siente que los nuevos espacios en redes sociales roban protagonismo a sus planas impresas.
Que cerca de las oficinas de la Delegación de la SEDESOL Hidalgo colgaron una lona con la imagen de un meme de Onésimo Serrano González con las frases: “Eres Tremendo”, “Casi no tienes dónde sentarte”, “Poeta Onésimo”, “El Delegator”, “Sabemos que esto es cierto”, “¿Cuántas más, Onésimo?”.
Que muy devaluado anda el concepto de violencia de género, en el que buena parte de personajes han escudado carencias o disfrazado culpas.
Que resultó noticia impactante para algunos funcionarios enterarse que mujeres jóvenes les entregan favores únicamente por su posición; resulta que los políticos hidalguenses en verdad creían que eran el “azote de la muchachada” por su varonil belleza.
Que quien falta de ofrecer conferencia de prensa es Ramón Ramírez Valtierra.
Que gracias a la reciente parodia mediática ha revivido el tema de la regulación de redes sociales, por cierto, propuesta que postuló el gobernador Omar Fayad Meneses como senador.
Que es la firma jurídica “Díaz” la encargada de la denuncia contra un perfil de Facebook por los delitos cibernéticos, robo, difamación, calumnias y lo que resulte. Dicha firma la encabeza el hijo de Francisco Díaz Arriaga, expresidente del Tribunal Superior de Justicia de Hidalgo.
Por: YO COMO QUE OÍ..
ADVERTENCIA: LO QUE SE ESCRIBE EN ESTA COLUMNA NO ES INFORMACIÓN OFICIAL NI CONFIRMADA, RECOGE LO QUE SE DICE, SE COMENTA Y SE CUCHICHEA SOBRE LOS PERSONAJES E INSTITUCIONES QUE AQUÍ SE ABORDAN. NI SE ENOJEN NI SE ALEGREN, SINO TODO LO CONTRARIO.
