Apóstol de la democracia, XXIV

Conflictos políticos

 

Francisco y Zapata.

 

ZAPATA: Usted me dijo que iba ser lo más importante.

FRANCISCO: Y lo reitero, general. Pero la restitución de la tierra no es hacer confiscaciones.

ZAPATA: Pues enton’s dígame qué tengo que hacer.

FRANCISCO: Esperar.

ZAPATA: ¿Esperar? ¿A que nos sigan atacando los caciques?

FRANCISCO: Ya estoy trabajando en un proyecto. Pero antes tenemos que blindar las finanzas. Si no lo hacemos perderemos cualquier posibilidad para hacerlo como se debe; con todas las garantías de la ley.

ZAPATA: (pausa) No entiendo.

FRANCISCO: Qué es lo que no entiende.

ZAPATA: Si ganamos la Revolución fue por la tierra, y ora me dice que hay que respetar la ley. ¿Usted se entiende?

 

Silencio.

 

ZAPATA: Creí que la cosa iba ser diferente.

FRANCISCO: Ya lo es, general. Sólo le pido paciencia.

ZAPATA: ¿Sabe cuánto llevamos esperando?

FRANCISCO: Me lo imagino.

ZAPATA: Pues no se lo imagine. ¡Mejor hágalo, porque si no la guerra será contra usted!

FRANCISCO: No me amenace, general.

ZAPATA: No es una amenaza. Sólo le recuerdo que mi gente no olvida sus promesas.

 

Zapata sale. Entra Gustavo.

 

GUSTAVO: Te están esperando.

 

Francisco asiente. Sale Gustavo. Entran TRES PETROLEROS, hombres de la alta sociedad.

 

PETROLERO 1: Estamos preocupados, señor presidente. Y hablo por los tres al decir que la inseguridad es nuestro principal problema para seguir explotando petróleo.

FRANCISCO: Vamos aumentar la vigilancia en los pozos.

PETROLERO 2: ¿Y las indemnizaciones? Aún no hemos recibido nada por la guerra.

FRANCISCO: Ustedes saben que eso jamás fue prometido.

PETROLERO 2: No importa, necesitamos dinero para volver a echar andar el negocio. ¡Sufrimos muchas pérdidas!

FRANCISCO: Mi gobierno no tiene dinero. Mucho menos para ustedes, quienes, con todo respeto, siempre apoyaron a Díaz.

PETROLERO 3: No pensé que fuera rencoroso, presidente Madero.

FRANCISCO: No lo soy. Y por eso recibirán ayuda de mi gobierno para echar andar la industria. Pero hasta que hayamos cumplido con las promesas agrarias de la Revolución. (transición) Tengo otros asuntos que atender. Que les vaya bien, señores.

 

Los petroleros salen molestos. Entra Gustavo cabizbajo.

 

FRANCISCO: Qué pasa, por qué traes esa cara.

GUSTAVO: Hay malas noticias: (Pausa) Pascual Orozco se levantó en armas.

FRANCISCO: (pausa) Qué es lo que quiere.

GUSTAVO: Dice que no hemos cumplido con muchas promesas revolucionarias.

FRANCISCO: ¿Quién está a cargo de la Defensa?

GUSTAVO: El ministro de guerra. General González Salas.

FRANCISCO: Dile que tiene a su disposición todo el armamento disponible. Le voy a mandar a Villa como refuerzo y-

GUSTAVO: (interrumpe) Su ejército fue emboscado. Prefirió el suicidio a la deshonra. (pausa) ¿A quién vas a poner en su lugar?

FRANCISCO: ¿Quién le sigue en escalafón?

 

Entra VICTORIANO HUERTA.

 

FRANCISCO: General Huerta. Gestione un armisticio. Intente convencer a Orozco de su error. Villa lo conoce bien, él le puede ayudar a persuadirlo.

HUERTA: ¿Y si no quiere?

FRANCISCO: Haga todo lo posible. Dígale que estoy dispuesto a entrevistarme con él.

HUERTA: Pero… ¿Y si no quiere?

FRANCISCO: Entonces defienda la República.

HUERTA: Ta’ bueno. Sólo le advierto algo. No quiero al animal ése cerca de mí.

FRANCISCO: (pausa) A quién se refiere.

HUERTA: Hablo del maldito de Villa.

FRANCISCO: Retírese, general.

 

Huerta sale.

 

GUSTAVO: ¿Confías en él?

FRANCISCO: No. Por eso hay que mantenerlo cerca.

 

Continúa XXV

 

Por: Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".






EL INDIO FILÓSOFO - Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".