De la crisis de los subprime a la del coronavirus

La crisis de los subprime (créditos, especialmente hipotecas de alto riesgo) amenaza con profundizar la crisis del capitalismo iniciada en 2008 y postergar su recuperación. El taller mundial de las manufacturas, China, ha parado su aparato productivo debido a la epidemia del coronavirus y ha reducido su demanda de petróleo, lo cual ha provocado una caída de los precios, que ha obligado a los países agrupados en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y Rusia a replantear su producción.

Lamentablemente, durante la reunión entre la OPEP y Rusia no se pudo llegar a un acuerdo para reducir la producción petrolera y mantener el nivel actual de precios. Producto de ello, Arabia Saudita ha decidido colapsar los precios del petróleo y se dispone a inundar los mercados con combustible barato, por lo que el aumento de la oferta por encima de la demanda mundial actual, combinado con la reducción de su consumo por la epidemia del coronavirus, ha provocado una tormenta sin precedentes en los mercados desde la Guerra del Golfo en 1991.

Aunque algunos analistas consideran que esta crisis es coyuntural y pronto se llegará a una solución que beneficie a todos, lo cierto es que Arabia Saudita ha respondido de manera contundente. El domingo pasado, los reportes de los países asiáticos señalaban un colapso de los mercados financieros y al día siguiente el barril de petróleo Brent cayó más del 26.85%, perdiendo más de 35 dólares, llegando a venderse hasta en 31.26 dólares el barril. En tanto que, el precio del petróleo WTI llegó a venderse hasta en 27.38 dólares el barril y la mezcla mexicana se derrumbó en un 31%, al venderse en 24.43 dólares por barril.

Otra consecuencia del desacuerdo OPEP-Rusia fue que los mercados financieros sufrieron un infarto inmediato. El índice Dow Jones en Wall Street caía en 7.79%, el S&P 500 en 7.60% y el Nasdaq 7.29%; el índice Nikkei en Japón cayó en 5% y el CAC 40 en París en 8%; una caída sin precedentes desde la crisis de 2008, lo que podría llevar el barril del petróleo a cerca de 20 dólares.

Según los medios internacionales, la propuesta de la OPEP para hacer frente a la caída de los precios del petróleo no fue bien recibida por Arabia Saudita, que respondió de inmediato anunciando que estaba mejorando su producción, la que había estado restringiendo voluntariamente durante los últimos 4 años para evitar la caída de los precios internacionales del petróleo; razón por la cual estaba bajando sus precios para sus ventas en Europa y Estados Unidos, de 7 a 8 dólares por barril.

Al romperse el pacto entre la OPEP y Rusia, Arabia Saudita podría aumentar su producción de 9.7 millones de barriles por día en marzo a 10.5 u 11 millones en abril; muy cerca de su capacidad de producción que puede alcanzar los 12 millones de barriles diarios, haciendo que los precios del crudo se desplomen cerca de sus costos de producción, frente a una reducción sustancial del consumo de petróleo, producto de la parálisis del aparato productivo chino.

Por ahora el banco francés “Société Générale” ha calculado que las existencias mundiales de petróleo fueron superiores a los 5 millones de barriles por día en el primer trimestre, lo que representa el 5% de la oferta mundial. Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), gracias a la crisis del coronavirus, se ha estimado que el consumo de petróleo podría caer en 0.1% en este año, por primera vez después de 2009 derivado de la disminución de los vuelos y los problemas de movilidad terrestre entre diferentes países. Sólo la aviación representaba casi el 1% del PIB mundial y el 8% de la demanda de petróleo, de acuerdo a la AIE y sólo China representaba cerca del 80% del consumo de petróleo en 2019.

El mundo capitalista, afectado por la crisis sanitaria del coronavirus, ahora víctima de la ruptura entre Arabia Saudita y Rusia, perturba la economía mundial y la geopolítica de la energía. Recordemos que en 2016 se desplomaron los precios del petróleo y llegaron prácticamente al nivel de sus costos de producción, por lo cual, la OPEP y otros diez países exportadores de petróleo, entre ellos Rusia, acordaron limitar su producción, ayudando a la recuperación de los precios. Ahora, seguramente los presupuestos públicos de muchos países productores de petróleo, como México, se verán en aprietos producto de los desequilibrios de los mercados petroleros.

Avatar photo

Por: José Luis Ortiz Santillán

Economista, amante de la música, la poesía y los animales. Realizó estudios de economía en la Universidad Católica de Lovaina, la Universidad Libre de Bruselas y la Universidad de Oriente de Santiago de Cuba. Se ha especializado en temas de planificación, economía internacional e integración. Desde sus estudios de licenciatura ha estado ligado a la docencia como alumno ayudante, catedrático e investigador. Participó en la revolución popular sandinista en Nicaragua, donde trabajó en el ministerio de comunicaciones y de planificación. A su regreso a México en 1995, fue asesor del Secretario de Finanzas del gobernador de Hidalgo, Jesús Murillo Karam, y en 1998, fundador del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.


ARCHIVADO EN:
, , , , , , , , ,



Avatar photo

CONTEXTO ECONÓMICO GLOBAL - José Luis Ortiz Santillán

Economista, amante de la música, la poesía y los animales. Realizó estudios de economía en la Universidad Católica de Lovaina, la Universidad Libre de Bruselas y la Universidad de Oriente de Santiago de Cuba. Se ha especializado en temas de planificación, economía internacional e integración. Desde sus estudios de licenciatura ha estado ligado a la docencia como alumno ayudante, catedrático e investigador. Participó en la revolución popular sandinista en Nicaragua, donde trabajó en el ministerio de comunicaciones y de planificación. A su regreso a México en 1995, fue asesor del Secretario de Finanzas del gobernador de Hidalgo, Jesús Murillo Karam, y en 1998, fundador del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.