A últimas fechas el cine israelí ha tenido una apertura y toca temas que antes eran tabú, como lo muestra Un ciudadano honesto tercer filme de Ezrah Mudag que tras formar parte de la LXXIII Muestra Internacional de Cine, se estrenó en la Cineteca Nacional
El guión del propio realizador narra la historia de Ben (Shlomi Bertonov) y Raz (Ariel Wolf), una pareja gay que está pensando en tener un hijo con vientre subrogado.
Viven en un barrio popular de Tel Aviv, a donde han llegado refugiados eritreos de color.
Ben ve con enojo como uno de los vecinos maltrata un arbolito que él sembró y decide llamar a la policía.
Estos tienen una reacción brutal y acaban matando al tipo a golpes.
Ben se percata de ello y comienza a tener tantos remordimientos que deja de hacer el amor con Raz, y se cuestiona tener un hijo en ese peligroso barrio.
El director de Beve Shaanan e Inertia no puede ocultar su visión racista del asunto, aunque la trate de disfrazar como la de un ciudadano capaz de denunciar la brutalidad policiaca, que todavía se ufana de que su actuación sea calificada.
Concerned citizen obtuvo el premio a la mejor música para Zoe Polanski, pero es uno de los pocos atractivos de la cinta.

Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.