Omar Fayad triunfa contra viento y olveristas

El arribo de Omar Fayad Meneses a la gubernatura del estado de Hidalgo sucedió en medio de una guerra sucia por parte del grupo del exmandatario Francisco Olvera; a pesar de ello, la voluntad ciudadana se impuso otorgando un triunfo contundente al actual jefe del Ejecutivo.

Conforme transcurrieron los meses del primer año, las lides olveristas buscaron por todos los medios desestabilizar a los inquilinos de la Plaza Juárez para dar la imagen de que no hubo mejor administración que la suya, y de paso, impedir al gobernador formar a cabalidad un grupo político suficientemente fuerte que los desplazara.

Por su parte, los integrantes del gabinete concentraron sus esfuerzos en generar líneas de política pública que trascendieran a la brevedad en beneficios para los hidalguenses, y entre las muchas tareas que emprendieron se encuentra la atracción de inversiones extranjeras.

Este tema resulta de especial atención dado que en el sexenio anterior era por todos sabido el hecho de que cualquier empresa que tuviera la intención de instalarse en el estado debía pagar cifras millonarias por ello, de modo que se ahuyentaba a cualquier inversionista y se perdían beneficios para la población.

Omar Fayad hizo su arribo con prácticas que innovaban en el ejercicio de gobierno, abriendo las puertas a la inversión extranjera y al poco tiempo ha logrado posicionarse como uno de los gobernadores con mayor aceptación en el país, mientras en Hidalgo pasa a la historia por concretar la suma más alta en inversiones.

Así se da paso a una nueva narrativa en la entidad, a través de la cual Omar Fayad trasciende en planas nacionales por su forma de gobernar con proyecto a futuro. Seguramente vendrán mayores inversiones que catapulten a la entidad como zona industrial.