Pachuca, a merced de un gobierno débil

El pasado viernes 8 de diciembre la Federación de Organizaciones Independientes del Estado de Hidalgo (FOIDEH) llevó a cabo una protesta frente a Casa Rule que terminó en la aprehensión de su líder, Oscar “El Perro” Pelcastre, por causar daños a una patrulla y ultraje a la autoridad; sin embargo, el domingo fue liberado por falta de interés del Ayuntamiento pachuqueño, que no presentó pruebas ni compareció a formular la querella.

En pocas palabras: Yoli Tellería armó un gran circo mediático sin responsabilizarse de la ciudadanía que representa, permitiendo la pérdida económica de los locatarios del centro, que se vieron obligados a cerrar sus negocios por miedo al vandalismo que pudieran causar los conocidos comerciantes ambulantes encabezados por “El Perro” Pelcastre.

El problema con el comercio ambulante en Pachuca es un mal conocido por todos, por lo que fue retirado de dicho perímetro, lo que olvidó la presidenta municipal fue ofrecer una solución eficaz alterna al problema, pues resulta descabellado pedirle a un grupo de personas que dejen de percibir su sustento económico.

Tellería Beltrán opinó que sería algo sencillo retirar a todos esos comerciantes con la promesa de colocarlos en algún otro lugar, pasando meses sin que fuera resuelto el tema, hecho que orilló a las manifestaciones constantes, cuyas consecuencias las está padeciendo todo el centro pachuqueño.

La falta de sensibilidad social de la alcaldesa no pudo ser más evidente ni desastrosa, al pensar que bastaba con retirar a los comerciantes del centro sin pensar en que dejaría sin entradas económicas a familias enteras, al tiempo que su debilidad como autoridad municipal mostró incapacidad al afrontar los hechos violentos en que devengaron sus decisiones anteriores.

Ahora Yolanda Tellería puso a disposición a un presunto delincuente sin presentar pruebas en su contra, esperando que fueran las instancias estatales quienes resolvieran el problema que ella ocasionó, es decir, evade su responsabilidad y una vez más espera que el Gobierno Estatal arregle lo que ella descompuso.

Mientras tanto, Pachuca se hunde en problemas diversos por falta de visión para gobernar, sensibilidad social y responsabilidad de un débil Ayuntamiento.