Este domingo durante una mesa de diálogo en el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSHu) algunos de los voceros se deslindaron del movimiento estudiantil que mantiene en paro a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Argumentaron que han sido objeto de amenazas y acoso que atribuyen, principalmente, a la familia Sosa Castelán y al presidente del Consejo Estudiantil Universitario, Esteban Rodríguez Dávila.
Los alumnos aseguraron temer por su integridad ya que han sido perseguidos e incluso uno de ellos fue abordado y correteado por dos hombres mientras se dirigía a su domicilio.
Estos hechos, así como llamadas anónimas y mensajes de voz, han generado temor aunado a algunas inconformidades, entre las que mencionaron que el movimiento se ha fragmentado y se ha perdido de vista la razón por la que inició.
Derivado de lo anterior es que estos voceros se retiraron y aseguraron no tendrán nada que ver con las resoluciones que se tomen de ahora en adelante, porque prefieren conservar su bienestar no únicamente físico, sino psicológico y moral.