Redacción
Son ya 58 las víctimas mortales del tiroteo sucedido la noche del domingo en Las Vegas, Nevada, donde hasta el momento se contabilizan 515 heridos. El responsable del ataque fue Stephen Paddock, un contador público jubilado de 64 años de edad, quien tenía al menos diez armas de alto poder en la habitación del piso 32, desde donde hizo los disparos; se suicidó antes de que llegaran los equipos de tácticas especiales.
Joseph Lombardo, jefe del departamento del sheriff del condado de Clark, indicó que en las investigaciones aún no se han podido determinar las causas que llevaron al sujeto a cometer el atentado y señaló que éste se encontraba en la habitación del hotel Mandala Bay Resort and Casino desde el pasado 28 de septiembre.
Sin embargo, Amag, órgano de propaganda del grupo Estado Islámico (EI), dijo el lunes que el autor del atentado de Las Vegas era un soldado del EI”. Muy rápidamente el FBI declaró que no tenía pruebas de “ningún vínculo con un grupo terrorista internacional”.
Según informaciones de la policía, Paddock no tenía ningún antecedente policial ni registro de arresto. Además de contador público, tenía una licencia de piloto y poseía permiso para caza mayor, válido para el territorio de Alaska.
