Jessica Blancas, ¿todo bajo control?

MARTHA SÁENZ

Jessica Blancas Hidalgo, secretaria de Finanzas, compareció ante la Comisión de Hacienda y Presupuesto. Concentró su informe en logros estatales sobre recepción y recaudación de impuestos, siendo muy elogiada por su amplio vocabulario en la materia, así como por asistir sin asesores.

Habló del fortalecimiento a la recaudación interna en la aplicación de programas en materia de seguridad como “Hidalgo crece contigo” para procurar un Padrón Vehicular con 3 programas, pretendiendo recaudar 372 millones 993 mil 719 pesos; con reemplacamiento al cierre del programa se lograron 596 millones 770 mil pesos. También habló de sistemas de vigilancia municipales como plus para coordinar obligaciones, rebustecidos debido al incremento de recursos federales gestionados, lo que significaría una responsabilidad en el uso de recursos en Ayuntamientos.

Durante la lectura del segundo informe de labores declaró: la deuda pública registrada ante SHCP contempla 5 créditos bancarios, 2 con Banca de Desarrollo y 3 con Banca Comercial; para 2016 la deuda por dichos créditos ascendía a 5593 millones 319 mil 600 pesos, durante septiembre de 2016 a septiembre de 2018 se realizaron pagos de capital por 486 millones 684 mil 315 pesos, disminuyendo 8.75% del saldo de la deuda, 5106 millones 635 mil 285 pesos.

Minutos después, a pregunta expresa de la panista Claudia Luna Islas sobre las pasadas declaraciones de la titular de la Secretaría de Finanzas sobre la existencia de una deuda pública de aproximadamente 15 mil millones de pesos, que al día siguiente cambió por un aproximado de 5 mil millones de pesos, Blancas Hidalgo afirmó que en 2016 el total de deuda registrada ascendió a 14 mil 835 millones 39757 pesos, pero para 2018 se redujo 26.11% quedando en 10 mil 961 millones 479 mil 290 pesos.
A la réplica de Luna Islas para esclarecer la respuesta, la titular de Finanzas, respondió: “Para ser específicos existen dos tipos de deuda: la deuda que está reconocida ante la SHCP, que es de la que hablamos , que asciende a 5 mil millones de pesos con los 5 créditos que hemos mencionado, es la que está registrada ahí. Y la segunda deuda, es la deuda o adeudos que tenemos aquí interna, y es la que asciende a los 14 mil millones de pesos, misma que gracias a las acciones del gobernador, Omar Fayad Meneses, para poder pagar créditos fiscales, para poder reducir el tema y saneamiento de las finanzas internas, ha tenido una reducción de 10 mil 961 millones 479 mil 290 pesos, esto asciende al 22.11% en términos porcentuales”.
Entonces, según lo dicho por Blancas Hidalgo, la primera deuda ronda en los 5 mil millones de pesos y la segunda se redujo a poco más de 10 mil millones de pesos. Siendo esta última cantidad la omitida en la lectura del informe. Con dichas declaraciones se entiende, de los dichos de la compareciente, que la suma total de deuda pública en Hidalgo es mucho más elevada que la presentada en la lectura del informe.
De la misma forma enunció 43 mil 122 millones 449 mil 946 pesos es lo que esperan recibir como presupuesto para 2019, esto con base en el buen uso de recursos que se avalan con los primeros lugares del índice de rendición de cuentas ante la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo.

Entre los logros que duplicó de anteriores comparecencias se encuentran la desaparición de áreas gubernamentales, reducción de nómina y gastos personales, la creación y redireccionamiento en materia administrativa, incremento de la inversión en la entidad y la digitalización del gobierno.

Después de su informe transcurrió la interacción con legisladores con respuestas, por parte de la compareciente, tan enredadas y llenas de tencnisimos que se debían escuchar hasta 5 veces para clarificar lo que intentó decir; Blancas Hidalgo “mareó” tan bien al Poder Legislativo que dio la impresión de ser una erudita en la materia.

Tras la presión sobre la percepción legislativa de falta de transparencia en el gasto público estatal, la secretaria de Finanzas optó por afirmar que el problema radica en la percepción de recursos federales que no están integrados en la presupuestación aprobada por el Poder Legislativo y que permite margen de maniobra para su ejecución.

Sobre los recursos que no han sido ejercidos por las diferentes secretarías y dependencias refirió que se debe a la división de presupuesto en 4 trimestres por año, siendo el último trimestre (lo estamos atravesando) en el que se concentra mayor cantidad de recursos para pago de nóminas y aguinaldos. A Morena le faltó preguntar cuál es el estimado de pago en este rubro.

Otro tema relevante fue el caso de la UAEH y municipios a los cuales, en declaraciones de los afectados, les fueron retenidos ministraciones designadas en recursos federales, siendo la respuesta de Jessica Blancas en ambas situaciones que se trataba de una retención federal, lo que los morenistas, aseguran, cambiará en el próximo sexenio.

De la retención de presupuesto a municipios la funcionaria declaró que la publicación de cifras del presupuesto es una estimación, y que el gobierno estatal es simplemente un intermediario en la transferencia de los recursos, pues de lo contrario se estaría incurriendo en una responsabilidad no sólo administrativa sino penal. También refirió, a cuestionamientos directos, que si algunos presidentes municipales no habían sido convocados era porque no estaban interesados en el tema, ya que el secretario de Gobierno mantiene un chat con alcaldes por medio del cual les envió la convocatoria para las mesas de trabajo.

Sobre el alto gasto designado a la partida de gastos de oficina, conocida en la prensa como gasto para “galletitas”, aseguró que ella solamente tiene como responsabilidad programar gasto, no su ejecución; aun así no logró ni intentó justificar por qué la secretaría a su cargo gastó 486 mil 699 pesos en alimentos, dejó sin ejecutar los principios de contención del gasto y asuteridad que se supone rigen a la dependencia bajo su cargo, que además es responsable de programar el presupuesto.

En las responsabilidades de las Secretarías de Cultura y Salud, sobre las que presentaron denuncias los legisladores por falta de, lo que consideraron, un correcto uso de los recursos públicos, fue firme al declarar que la utilización del presupuesto corre a cargo de los titulares y que, de incurrir en responsabilidades, no estarán exentos de la aplicación de sanciones administrativas o penales.

Pero fue al secretario de Seguridad Pública al que puso en grave predicamento al declarar que el emplecamiento no fue tema financiero sino de seguridad para recuperar vehículos robados, pues las nuevas placas cuentan con un chip localizador, pero “no le pregunten al secretario porque no les va a saber explicar”, dijo, ya que el padrón e información recabada con los famosos chips está a cargo de la Secretaría de Finanzas, no de la de Seguridad.

Mientras el diputado de Morena, Ricardo Baptista González planteó como meta de la LXIV Legislatura pagar la deuda pública, Blancas Hidalgo refirió que se necesita un poco más que optimismo en el tema, pues el solo intento dejaría sin recursos a las áreas prioritarias como salud, programas alimentarios, educación y seguridad. Hagan sus quinielas.