Ser y Devenir 126

Interpretar el lenguaje desde el ser o desde el devenir, esa es la cuestión.

—¿Y por qué no consideras ambas interpretaciones?

—Sólo el arte puede hacerlo.

Todo comenzó a estar bien en el internado Humboldt hasta que empecé a estar solo. Aislado, escondido y felizmente taciturno en mi oscura soledad impasible por el silencio de las voces ajenas.

—No estás solo.

—Quiero estar solo.

Pero ahora nadie me ha castigado, es mi propia mente la que libremente decide guarecerse en la torre Oeste y, mientras contemplo por la ventana a mis compañeros irse con sus respectivas familias, la inmaculada nieve desciende del cielo suavemente.

—Mírame otra vez —me dice el viejo espejo al fondo del pasillo, me observo y, desenfocando mi espíritu, me sumerjo en mis ojos.

Horas antes me había despedido de mis amigos, los cuatro me invitaron a pasar las vacaciones con ellos pero no quería arruinarle las fiestas a nadie y menos participar en la estupidez de la Navidad. Noah era el único de ellos que no la celebraba, pero tampoco quería arruinarle el Janucá.

—Mis padres no creen en eso —me dice riendo.

—¿Son ateos?

—Científicos.

Benson me entrega una caja con moño:

—No vayas a hacer una tontería ahora que te quedes solo.

—Y si la hago prometo avisarte.

—No te abrazo por mi gripa.

—No te preocupes y gracias.

—Yo no te traje regalo —me dice Sam—, pero quiero dejarte algo que puede ayudarte aunque tú no creas en Él.

—¿Qué es?

—Guárdalo bien —me da un pequeño crucifijo negro— y prométeme que lo vas a cuidar. Era de mi abuela, un cristo protector contra la brujería.

—¿Estás seguro que quieres dejármelo?

—Seguro —me dice y me abraza—. Cuídate mucho.

—Yo te traigo algo más eficaz —dice Bob dándome su navaja—. Uno nunca sabe cuando la puedas necesitar.

—Muchas gracias —le digo y también me abraza.

Take care, compadre.

Noah, llorando, vuelve a abrazarme.

—Los voy a extrañar —sinceramente les digo.

Los cuatro se retiran, me quedo unos minutos inmóvil, casi sin respirar, reacciono y me voy corriendo a la torre.

—Adiós, amigos —murmuro al verlos por la ventana yéndose con sus familias mientras la nieve desciende del cielo armoniosamente. Una eufonía silenciosa.

Are you mexican or mexica?

Mexican.

Why?

—Los mexicanos somos el resultado de la extinción de los mexicas.

Why?

—Es muy complicado de explicar, pero en la biblioteca vi el libro de William H. Prescott, ese te puede ayudar.

¿A quién le hablamos cuando estamos solos?

—Ya te dije que no estás solo.

¿Con quién deliberamos? ¿De dónde proviene esa voz a la que no podemos engañar ni corromper ni esconder nada? ¿Qué criterios emplea para juzgar tus acciones? ¿Los mismos que tú o emplea otros? Y, si son otros, ¿de dónde provienen? ¿Cómo se constituyeron? ¿Cómo se configuraron? ¿Quién los ha creado?

—¿Crees en Dios?

—¿En qué Dios?

—Sólo hay un Dios.

—Eso dicen los monoteístas.

—¿En qué Dios crees?

—En uno que sólo te habla a ti.

—¿Tu voz interior?

—Algo así.

—Eso no es una deidad sino tu propia conciencia.

—Llámale como quieras.

—¿Eres cartesiano?

—No.

—Para Descartes la voz de la conciencia es la voz de Dios, ¿ese es tu Dios?

—Yo no tengo Dios.

—¿Y tu voz interior?

—Ese es otro concepto de Dios.

Interpretar los conceptos desde el ser o desde el devenir, esa es la cuestión básica, interrogante elemental y dilema fundamental de la filosofía, e.g., la libertad, la igualdad y la justicia o las libertades, las igualdades y una pluralidad de tipos de justicia. ¿La moral o las morales?

Nietzsche no está proponiendo una moral sino que rechaza la universalización de toda moralidad.

—Personas diferentes, morales diferentes.

 

Continúa 127

Por: Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".






EL INDIO FILÓSOFO - Serner Mexica

Filósofo por la UAM, estudió la Maestría en la UNAM y el Doctorado en la Universidad de La Habana. Fue Becario de Investigación en El Colegio de México y de Guionismo en IMCINE. En 2007 obtuvo el Premio Nacional de Dramaturgia EMILIO CARBALLIDO por su obra "Apóstol de la democracia" y en el 2011 el Premio Internacional LATIN HERITAGE FOUNDATION por su tesis doctoral "Terapia wittgensteiniana".